El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador y su esposa, la escritora Beatriz Gutiérrez Müller, iniciaron el proceso para registrar sus nombres y siglas como marca comercial ante el Instituto Mexicano de la Propiedad Industrial (IMPI), con la intención de evitar que terceros puedan lucrar con ellos.
El secretario particular del mandatario, Alejandro Esquer Verdugo, fue el encargado de comenzar los trámites, por los cuales se pagaron alrededor de 17,000 pesos mexicanos (769 dólares).
El expediente 2352324, abierto por el IMPI el 27 de abril, contempla la posibilidad de que la marca "Andrés Manuel López Obrador" sea utilizada en exclusiva por el jefe del poder Ejecutivo mexicano en materias como educación, servicios de entretenimiento, e igualmente en actividades deportivas y culturales.
Además, se abrió el expediente 2352331 a fin de proteger el nombre del presidente y evitar su comercialización en anuncios publicitarios, gestión de negocios comerciales, administración comercial y trabajos de oficina, según El Universal.
En mayo, la secretaria de Economía, Graciela Márquez Colín, junto con el director del IMPI, Juan Lozano Tovar, informaron que tenían registro de algunas personas que habían tratado de registrar como marca las siglas "AMLO", aunque en ningún caso se les otorgó porque existe una legislación en la materia que lo impide.
Por ello, al presentar su solicitud para registrar las siglas "AMLO" como marca propia, López Obrador debió informar al Instituto Mexicano de la Propiedad Industrial que comenzó a usar estas siglas en 1995, cuando encabezó la Caravana por la Democracia. Entonces, el actual presidente marchó desde el estado de Tabasco a la Ciudad de México para demandar la anulación de la elección estatal del Partido de la Revolución Democrática (PRD), la cual acusó como fraudulenta.
Por su parte, Beatriz Gutiérrez Müller también inició los trámites para registrar su nombre y siglas, según consta en los expedientes 2352319 y 2352328, en los rubros de publicidad, gestión de negocios comerciales, trabajos de oficina, así como en temas educativos, servicios de entretenimiento, actividades deportivas y culturales.
El registro que otorga el IMPI permite el uso exclusivo de una marca a sus propietarios en México por un periodo de 10 años.