La secretaria de Desarrollo Turístico del estado de Puebla, Carla López-Malo, estará presente este viernes en el sorteo que se celebrará en Washington, D.C., donde se definirán los grupos del Mundial de Futbol 2026. Su participación forma parte de una estrategia estatal para establecer contacto directo con las delegaciones de los países que disputarán sus encuentros en el estadio Banorte, antes conocido como estadio Azteca, una de las sedes mexicanas de mayor relevancia en la próxima justa mundialista.
El propósito de la visita es claro: posicionar a Puebla como una opción atractiva para que las selecciones nacionales realicen sus entrenamientos y campamentos previos a los partidos. La secretaria López-Malo buscará promover la infraestructura deportiva, hotelera y de servicios con la que cuenta el estado, así como su cercanía con la Ciudad de México, lo que facilitaría los traslados hacia la sede principal.
Uno de los argumentos centrales que presentará la delegación poblana es la renovación en curso del estadio Cuauhtémoc, cuyo terreno de juego está siendo sometido a una modernización integral.
Estos trabajos se llevan a cabo con el objetivo de cumplir con los estándares exigidos por la FIFA para que un recinto pueda fungir como campo de entrenamiento oficial durante el Mundial. Las obras incluyen la sustitución del césped, la mejora del sistema de drenaje, la nivelación del terreno y la adecuación de espacios complementarios para deportistas y cuerpos técnicos.
El estadio Cuauhtémoc no es ajeno a este tipo de eventos de talla internacional. Fue sede mundialista en 1970 y 1986, albergando encuentros que marcaron épocas y que consolidaron su prestigio como uno de los recintos futbolísticos más emblemáticos del país. Con su renovación, el inmueble podría volver a tener un rol destacado en 2026, esta vez como centro de preparación para alguna selección participante.
