
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, instó a los países de la OTAN a imponer aranceles del 50 al 100 por ciento sobre los productos procedentes de China, alegando que esta medida contribuiría significativamente a poner fin al conflicto en Ucrania.
"Creo que si la OTAN, como grupo, impone aranceles del 50 al 100 por ciento a los productos chinos, que se eliminarían por completo una vez que termine la guerra entre Rusia y Ucrania, esto ayudaría mucho a poner fin a esta guerra mortal pero absurda", publicó Trump en la red social Truth Social.
A LETTER SENT BY PRESIDENT DONALD J. TRUMP TO ALL NATO NATIONS AND, THE WORLD: “I am ready to do major Sanctions on Russia when all NATO Nations have agreed, and started, to do the same thing, and when all NATO Nations STOP BUYING OIL FROM RUSSIA. As you know, NATO’S commitment…
— Trump Truth Social Posts On X (@TrumpTruthOnX) September 13, 2025
China y EEUU, tras sostener en agosto negociaciones en Estocolmo, acordaron prorrogar por otros 90 días la vigencia de la pausa tarifaria.
Pekín y Washington de hecho se encuentran en estado de una guerra comercial, la cual estalló después de que Donald Trump gravara en febrero pasado con el 10 por ciento la importación de todas las mercancías chinas.
En marzo el arancel aumentó hasta el 20 por ciento. Luego, tras unos pasos que dieron las dos partes, las tasas estadounidenses sobre los productos chinos se situaron en 145 por ciento, mientras que las tarifas de China sobre las importaciones estadounidenses, en el 125 por ciento.
A mediados de mayo, China y EEUU acordaron bajar los aranceles recíprocos hasta el 10 por ciento. Como resultado, China empezó a gravar las importaciones estadounidenses con el 10 por ciento, mientras que EEUU está cobrando el 30 por ciento por los productos chinos, porque sigue vigente el arancel de "fentanilo" del 20 por ciento, que Washington había impuesto a Pekín, acusándolo de pasividad frente al tráfico de los componentes de fentanilo.
A finales de primavera y comienzos de verano, las partes presentaron acusaciones mutuas sobre la infracción de lo acordado.
A finales de julio, China y EEUU sostuvieron negociaciones en Estocolmo, que llegaron a ser la tercera ronda de consultas comerciales de alto nivel entre estas dos más grandes economías del mundo.