
La Asamblea General de las Naciones Unidas aprobó este viernes, por 142 votos a favor, una resolución que respalda la llamada Declaración de Nueva York, iniciativa impulsada por Francia y Arabia Saudí para reactivar las negociaciones de paz entre israelíes y palestinos.
El documento, que obtuvo diez votos en contra —entre ellos los de Israel, Estados Unidos, Argentina y Hungría— y doce abstenciones, plantea la creación de un Estado palestino independiente, soberano y económicamente viable, como parte de un proceso “tangible e irreversible” hacia la paz en Oriente Próximo.
La declaración había sido presentada en julio pasado en una cumbre a la que no asistieron representantes de Israel ni de Estados Unidos, pero que sentó las bases para una futura conferencia internacional convocada para este mismo mes en la sede de la ONU.
Tras la votación, el presidente francés Emmanuel Macron celebró el resultado en redes sociales. “Otro futuro es posible. Dos pueblos, dos Estados, viviendo juntos en paz y seguridad”, escribió, subrayando que el apoyo global abre la puerta a un plan de paz “concreto” que espera coordinar junto a Arabia Saudí y otros aliados.
Con este respaldo, la comunidad internacional envía una señal de presión diplomática para retomar el diálogo en una de las regiones más convulsas del mundo, aunque el camino hacia un acuerdo definitivo sigue lleno de desafíos políticos y de seguridad.