
Tras finalizar la Convención Bancaria 2025, el presidente de la Asociación de Bancos de México (ABM), Emilio Romano, anunció un plan para desincentivar el uso del efectivo e impulsar la digitalización del sistema financiero mexicano. Sin embargo, con el auge de la ciberdelincuencia, surge la interrogante sobre la seguridad de manejar dinero exclusivamente de forma digital, especialmente en el contexto de esta iniciativa.
De acuerdo con datos recientes de la ABM, en México, 90 % de las transacciones bancarias son digitales. Sin embargo, los delitos financieros digitales crecieron 30 % en 2024, con amenazas como phishing, robo de identidad y malware.
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— Paola Becerra (@Soy_PaolaBO) May 8, 2025
¿Qué tan seguro es solo manejar nuestro dinero vía digital? ¿Es más seguro que cargarlo en la bolsa o guardarlo en casa?
Manejar el dinero de forma digital es más seguro que llevar efectivo en la bolsa o guardarlo en casa, ya que evita robos físicos y ofrece protecciones institucionales, pero es un hecho que la ciberdelincuencia es una amenaza real.
El manejo de dinero digitalmente ofrece grandes beneficios a sus usuarios, puesto que las transacciones, ya sea por medio de tarjetas, apps o transferencias, son rápidas, accesibles y registradas, lo que facilita el seguimiento de gastos y reduce riesgos de pérdida física.
Además, en la actualidad, las plataformas digitales suelen contar con seguros contra fraudes, e incluso los sistemas bancarios cuentan con encriptación, autenticación multifactor y monitoreo en tiempo real, así como regulaciones como la Ley Fintech que protegen a los usuarios.
Asimismo, las billeteras digitales y apps como CoDi permiten pagos seguros sin contacto, reduciendo la exposición a riesgos físicos, y en caso de fraude, los bancos y regulaciones ofrecen mecanismos de protección, como tiempos límite para reportar y resolver incidentes.
La parte negativa de este tipo de transacciones es que generan un rastro de datos que puede ser explotado por empresas o gobiernos, y en este rubro, México aún enfrenta retos en ciberseguridad y protección de datos personales. Además, el phishing, malware, robo de identidad y clonación de tarjetas son amenazas crecientes, y los delincuentes aprovechan la falta de educación digital para acechar a las víctimas. Y no hay que olvidar que algunas plataformas cobran comisiones por transferencias o mantenimiento, lo que puede ser una desventaja frente al efectivo, que no tiene costos directos.
Ahora, los beneficios de contar con dinero en efectivo en la bolsa es que ofrece inmediatez y es útil en zonas con poca infraestructura tecnológica. No deja un rastro digital y, como dato revelador, en México, 74 % de las compras menores a 500 pesos se hacen en efectivo.
La desventaja de llevar dinero en la bolsa es la exposición a asaltos, extravíos o robos sin posibilidad de recuperación; sin registros, es difícil probar la propiedad o recuperar el dinero perdido; el efectivo facilita transacciones no declaradas y fomenta actividades ilícitas.
Por otro lado, la ventaja de guardar el dinero en casa evita la dependencia de bancos o tecnología; no hay registros ni exposición a ciberataques, y está siempre disponible en casos de emergencias donde no hay acceso a cajeros o internet.
La contra es que el dinero en casa es vulnerable a robos, incendios, inundaciones o deterioro físico; no genera intereses y pierde valor por inflación; no es viable para transacciones grandes o a distancia, y puede ser detectado por autoridades. Además, guardar grandes cantidades puede provocar ansiedad por posibles intrusos o pérdidas.