
El gobierno de Reino Unido se encuentra desarrollando un programa experimental que busca predecir asesinatos a través del análisis de datos personales y judiciales de individuos con antecedentes penales. Este sistema, actualmente en fase de investigación, utiliza algoritmos avanzados para identificar patrones de riesgo asociados a crímenes violentos.
De acuerdo con información publicada por The Guardian, el programa emplea herramientas de análisis de datos para procesar información de personas que tuvieron contacto con el sistema judicial británico. El objetivo es fortalecer la evaluación de riesgos y prevenir posibles delitos graves mediante el uso de tecnologías predictivas.
Los datos procesados incluyen información básica como nombres, fechas de nacimiento, género, etnia y números de identificación en la base nacional de la policía. Según el Ministerio de Justicia británico, "el algoritmo revisará las características de los delincuentes que aumentan el riesgo de cometer homicidio y explorará técnicas de ciencia de datos alternativas e innovadoras para la evaluación del riesgo de homicidio".
Desde la institución explicaron que esta iniciativa pretende proporcionar evidencia que permita mejorar los métodos de evaluación de riesgos existentes. En un comunicado oficial, se señaló: "El proyecto proporcionaría evidencia para mejorar la evaluación de riesgos de delitos graves y, en última instancia, contribuiría a proteger al público mediante un mejor análisis".
Asimismo, las autoridades confirmaron que los datos utilizados provienen únicamente de fuentes oficiales y se centran en personas que fueron condenadas o están bajo supervisión judicial, como en libertad condicional. El programa busca determinar si la combinación de nuevas fuentes de datos y herramientas ya existentes puede aplicar mejoras sustanciales en la predicción de crímenes violentos.
Pese a las aclaraciones, la iniciativa generó críticas por parte de organizaciones civiles. La ONG Statewatch advirtió que el proyecto podría incluir información de personas que no han sido condenadas, como víctimas de violencia doméstica. Según la organización, esto ampliaría el alcance de la base de datos más allá de lo anunciado oficialmente.
Sofia Lyall, investigadora de Statewatch, expresó su preocupación respecto a los posibles sesgos del sistema: "Este último modelo, que utiliza datos de nuestra policía y del Ministerio del Interior institucionalmente racistas, reforzará y magnificará la discriminación estructural que sustenta el sistema jurídico penal".
Críticos del proyecto señalan que los algoritmos, al basarse en datos históricos, podrían reproducir y amplificar prejuicios preexistentes en las instituciones encargadas del orden público. Las comunidades de origen étnico diverso y sectores con bajos ingresos, indicaron, podrían verse especialmente afectadas por evaluaciones automatizadas con sesgos incorporados.
En respuesta, el Ministerio de Justicia recalcó que el programa es una investigación piloto y se publicará un informe detallado en una etapa posterior. También recordó que el sistema penitenciario y de libertad condicional ya utiliza herramientas para valorar riesgos. (Notipress)