
El presidente venezolano, Nicolás Maduro, pidió el martes al Gobierno de El Salvador entregar a su país a sus 238 connacionales deportados desde EEUU, tras considerar que no cometieron delitos.
"Estamos activos para que el Gobierno de El Salvador entregue a estos muchachos que no cometieron ningún delito en EEUU, que no han cometido delito en El Salvador, que no le han dado el derecho a la defensa, el debido proceso, que no están condenados en EEUU ni por un juez", expresó el mandatario durante una movilización en Caracas en rechazo a la agresión contra los migrantes.
El mandatario reiteró que el traslado de los migrantes venezolanos a una cárcel de El Salvador viola el derecho internacional.
Asimismo, reafirmó que no descansará hasta lograr que estos ciudadanos regresen a su país.
El lunes, Maduro pidió a su par salvadoreño, Nayib Bukele, no amparar la "injusticia" de EEUU luego de trasladar a migrantes venezolanos a una prisión en ese país centroamericano.
El presidente de EEUU, Donald Trump, invocó la Ley de Enemigos Extranjeros de 1798, la cual permite expulsar rápidamente a extranjeros en tiempos de guerra o invasión.
La normativa permite la expulsión de todos los venezolanos mayores de 14 años que presuntamente pertenecen al grupo criminal Tren de Aragua y no tienen pasaporte estadounidense o permiso de residencia permanente en el país.
Luego de que Trump invocara esta ley, el Gobierno de EEUU envió a El Salvador 238 venezolanos.
Por su parte, Caracas consideró que dicha normativa criminaliza a los migrantes venezolanos en territorio estadounidense y aseguró que "hará todo lo que haya que hacer" ante los organismos internacionales para garantizar el retorno de sus connacionales trasladados a El Salvador.