
El Departamento de Policía del Pueblo de Mount Pleasant, en Wisconsin, dio a conocer que un niño de 4 años llamó al 911 para reportar un “delito” que lo dejó profundamente decepcionado, ya que su madre se había comido su helado.
De acuerdo con una publicación en Facebook del Departamento de Policía, las oficiales Gardinier y Ostergaard arribaron al domicilio del menor tras recibir una llamada de emergencia que fue colgada, pero al llegar descubrieron que la llamada había sido porque el niño se enojó de que su madre se había comido todo el postre.
El pequeño estaba molesto y explicó a las oficiales que su madre “estaba siendo mala” y que debería ir a prisión por ello. Sin embargo, tras intercambiar un par de palabras, el menor se retractó y aseguró que no quería que su madre se metiera en problemas legales, pero quería tener más helado.
Al día siguiente, las oficiales regresaron al domicilio del menor con una sorpresa para el niño. En su cuenta de Facebook, el Departamento de Policía detalló que las agentes le llevaron un helado al pequeño con la intención de cerrar el caso de manera positiva, incluyendo una fotografía del momento.
Special thanks to @fox6now for showcasing the @MtPleasantWIPD on yesterday’s evening news! ???? https://t.co/ZQuBKGMKqL pic.twitter.com/k88NHbtFjC
— Mount Pleasant (@MountPleasantWI) March 7, 2025
Dado que no se trató de una emergencia real, usuarios en redes sociales criticaron que se haya premiado al niño por llamar al 911, enfatizando la importancia de educar a los menores sobre el uso adecuado de los servicios de emergencia. Otros, en cambio, destacaron la inocencia del menor y consideraron el gesto de las oficiales como una resolución amable para el conflicto