
La incertidumbre en los mercados bursátiles ante las medidas de Donald Trump es un tema candente, ya que ha generado expectativas y preocupaciones en el ámbito económico y financiero.
La política económica del mandatario estadounidense y sus declaraciones sobre la guerra comercial han generado confusión entre los inversores y han afectado la confianza del consumidor y del sector empresarial. Los mercados bursátiles han experimentado una caída debido a la incertidumbre generada por sus amenazas de imponer nuevos aranceles.
Tan sólo hay que recordar que, en los últimos 40 años, el mundo ya vivió dos fuertes caídas en los mercados bursátiles con graves consecuencias.
La primera fue el 19 de octubre de 1987, conocido como el "lunes negro" cuando el índice Dow Jones cayó un 22.6 % en un solo día, lo que represento la mayor caída porcentual en la historia del índice. Incluso mayor que el desplome bursátil de 1929, justo antes de la Gran Depresión.
On this day in 1987 the Dow Jones had its worst day in history dropping 22.6% making the day known as Black Monday pic.twitter.com/hGV46wKrEx
— Evan (@StockMKTNewz) October 19, 2023
Esta crisis se debió a una combinación de factores, incluyendo la sobrevaloración del mercado, la especulación excesiva y la falta de regulación. Analistas señalaron que este evento se presentó por el recrudecimiento de las hostilidades en el golfo Pérsico, el miedo a la subida de los tipos de interés, un mercado alcista de cinco años sin correcciones significativas y una negociación informatizada que aceleró las ventas y alimentó el frenesí entre los operadores humanos.
Otros más aseguraron que se presentó gracias a una desaceleración económica en Estados Unidos, evidenciada por las cifras de empleo, así como a una fuerte volatilidad en los mercados asiáticos tras un giro sorpresivo en la política monetaria de Japón.
La crisis del Lunes Negro llevó a una recesión en varios países, incluyendo Estados Unidos, y provocó una reevaluación de las prácticas de inversión y regulación del mercado.
En un escenario similar, en 2008, el índice Dow Jones cayó 733 puntos desde su máximo en octubre de 2007 hasta su mínimo en marzo de 2009. En esta ocasión se debió a otra combinación de factores, el precio de las viviendas en Estados Unidos había aumentado significativamente desde principios de la década de 2000, lo que llevó a una burbuja inmobiliaria. Muchos compradores de viviendas habían obtenido préstamos con tasas de interés variables y condiciones de pago poco realistas.
Mañana 15 de octubre pero de 2008
— EddTrader ???? (@EddtraderMx) October 15, 2021
Las acciones registran su peor caída porcentual desde 1987 y la segunda caída de puntos más grande de la historia. Dow Jones cayó 733 puntos un descenso del 7,78% un descenso del 7,78%. #bolsamx pic.twitter.com/cqGBN3Z040
Los bancos y otras instituciones financieras habían otorgado préstamos de manera excesiva, sin llevar a cabo debidas evaluaciones de riesgo, lo cual provocó una sobreexpansión del crédito, que finalmente se convirtió en una crisis de liquidez. Además, la falta de regulación y supervisión adecuada permitió que las instituciones financieras tomaran riesgos excesivos y se involucraran en prácticas poco éticas.
La caída del Dow Jones en 2008 desencadenó una recesión global, que afectó a muchas economías del mundo. La crisis financiera llevó a una pérdida significativa de empleos en muchos sectores, incluyendo la construcción, la manufactura y los servicios financieros, lo que llevó al gobierno de Estados Unidos y otros en el mundo a implementar medidas de rescate para evitar un colapso total del sistema financiero.