El arancel extra del 25 por ciento impuesto por Washington a todo el acero y el aluminio procedentes de Canadá es un "ataque" a los canadienses, y Ottawa se asegurará de que su respuesta tenga el máximo impacto en EEUU, declaró este martes Mark Carney, primer ministro entrante.
"Los últimos aranceles del presidente (de EEUU, Donald) Trump son un ataque a los trabajadores, las familias y las empresas canadienses. Mi gobierno se asegurará de que nuestra respuesta tenga el máximo impacto en EEUU y el mínimo impacto aquí en Canadá, al tiempo que apoyará a los trabajadores afectados. Mi gobierno mantendrá nuestros aranceles hasta que los estadounidenses nos muestren respeto y asuman compromisos creíbles y fiables con el comercio libre y justo", escribió Carney en la red social X.
President Trump’s latest tariffs are an attack on Canadian workers, families, and businesses. My government will ensure our response has maximum impact in the US and minimal impact here in Canada, while supporting the workers impacted.
— Mark Carney (@MarkJCarney) March 11, 2025
My government will keep our tariffs on…
Trump anunció este martes que dio instrucciones al secretario de Comercio, Howard Lutnick, para que añada un arancel adicional del 25 por ciento a todo el acero y aluminio procedente de Canadá, elevándolo hasta el 50 por ciento.
Según el mandatario, la medida -que entrará en vigor el 12 de marzo- responde a la decisión de la provincia canadiense de Ontario de imponer un arancel del 25 por ciento a la "electricidad" que entra a EEUU.
"Si Canadá no elimina otros aranceles atroces y de larga data, aumentaré sustancialmente, el 2 de abril, los aranceles a los automóviles que entran a EEUU, lo que, esencialmente, cerrará permanentemente el negocio de fabricación de automóviles en Canadá", amenazó Trump.
Además, afirmó que "lo único que tiene sentido es que Canadá se convierta en nuestro querido quincuagésimo primer estado", dijo Trump, y agregó que en ese caso todos los aranceles "desaparecerán".
El primer ministro saliente de Canadá, Justin Trudeau, anunció la semana pasada la imposición de aranceles del 25 por ciento a productos estadounidenses por valor de 155.000 millones de dólares, en respuesta a un gravamen similar impuesto por Washington.
El presidente de EEUU replicó entonces que si Canadá aplicaba un arancel vengativo, Washington aumentaría de inmediato las tarifas en la misma cantidad.
