Desde el 1 de enero de 2025, obtener una licencia de manejo en Puebla implica superar nuevos requisitos, entre ellos un examen práctico obligatorio. Esta medida, impulsada por la Secretaría de Movilidad y Transporte (SMT), busca garantizar que los conductores estén mejor preparados, reduciendo los accidentes de tránsito que se atribuyen, en su mayoría, a errores humanos. No obstante, la exigencia del examen ha generado incomodidad entre los ciudadanos y un aumento en la oferta de licencias exprés gestionadas por particulares en redes sociales.
El examen práctico, que se lleva a cabo a través de un simulador de manejo, evalúa habilidades esenciales como el respeto a las señales de tránsito y la capacidad de maniobra en situaciones comunes de la vía pública. Este cambio surge como respuesta a cifras que indican que entre el 80 % de los accidentes de tránsito en el país son causados por el desconocimiento de las normas viales o la falta de pericia al volante.
Ante las nuevas exigencias, han proliferado en redes sociales anuncios de “gestores” que ofrecen licencias de manejo de otras entidades federativas, asegurando su legalidad y reduciendo los trámites al mínimo. “Trámite rápido, sin examen y 100 % legal”, prometen algunos de estos anuncios publicados en redes sociales.
Las licencias obtenidas por medio de gestores no oficiales no tienen validez legal, incluso si se ofrecen como "100 % legales". Si el proceso de obtención no sigue los procedimientos establecidos por la autoridad local o estatal, como la Secretaría de Movilidad, entonces la licencia es ilegal. Las autoridades responsables de la emisión de licencias tienen protocolos claros y verificados que incluyen no solo el pago de tarifas, sino también la presentación de ciertos documentos, el examen teórico y práctico, y, en algunos casos, exámenes médicos.
Usar una licencia obtenida de manera fraudulenta puede tener consecuencias legales. La persona podría enfrentar cargos por falsificación de documentos, lo que conlleva sanciones, incluyendo multas. Además, una licencia obtenida de manera fraudulenta podría generar problemas legales, especialmente en casos de accidentes o inspecciones de tránsito.
¿El examen práctico motivará a recurrir a gestores?
Algunas personas pueden sentirse intimidadas o desmotivadas por la necesidad de pasar un examen práctico, lo que podría aumentar la demanda de servicios fraudulentos. Sin embargo, esto no hace que la práctica de obtener una licencia de manera ilegal sea más aceptable ni legal. Este tipo de prácticas no solo pone en riesgo a los conductores que las obtienen, sino que también afecta la seguridad vial. Las personas que no han sido evaluadas adecuadamente en su habilidad para conducir representan un mayor riesgo tanto para ellas mismas como para otros en la vía pública.
Las autoridades pueden tomar medidas más estrictas en el proceso de emisión de licencias, como mejorar la verificación de documentos y las pruebas, o incluso dar un seguimiento más riguroso a los gestores no oficiales. Además, promover campañas de concientización sobre los riesgos legales y de seguridad de obtener licencias fraudulentas podría ayudar a reducir la demanda de este tipo de servicios.