Un equipo de investigadores identificó el caso más antiguo de peste bubónica fuera de Eurasia tras analizar muestras de una momia egipcia de 3,290 años de antigüedad. Los restos pertenecen a un hombre que aparentemente sufrió síntomas severos de la enfermedad antes de morir, y fueron conservados en el Museo Egipcio de Turín.
El descubrimiento fue llevado a cabo por expertos del centro de investigaciones italiano Eurac Research y fue presentado durante la Reunión Europea de la Asociación de Paleopatología en Leiden, Países Bajos.
El ADN de la bacteria Yersinia pestis, responsable de la peste, fue hallado tanto en los tejidos óseos como en el contenido intestinal de la momia, lo que confirma que el individuo padecía una etapa avanzada de la enfermedad al momento de su muerte.
Este hallazgo marca un hito en la historia de la peste, cuyas pandemias documentadas hasta ahora solo se habían registrado en Europa y Asia, y los rastros más antiguos databan de hace 5,000 años en restos hallados en Rusia.
La Yersinia pestis provocó tres pandemias históricas devastadoras, incluida la Peste Negra del siglo XIV, que acabó con decenas de millones de vidas en Europa. Sin embargo, este nuevo descubrimiento en Egipto amplía el entendimiento de su impacto en la antigüedad y su expansión geográfica.