El ejército israelí dijo hoy jueves que lanzó ataques aéreos "basados en inteligencia" contra objetivos militares controlados por los hutíes en la costa occidental y tierra adentro de Yemen.
Los aviones caza israelíes atacaron infraestructuras usadas por los hutíes en el Aeropuerto Internacional de Saná y las estaciones de electricidad de Hezyaz y Ras Kanatib, ambas localizadas en áreas controladas por los hutíes, así como los puertos de Hudayda, Salif y Ras Kanatib en la costa occidental, dijo el ejército en un comunicado. Agregó que esos sitios eran usados por los hutíes para contrabandear armas iraníes a la región y para el ingreso de oficiales iraníes de alto rango.
Imágenes que circulan en redes sociales mostraron grandes explosiones, humo negro y fuego en edificios en Yemen.
La ofensiva coincidió con un discurso televisado del líder hutí, Abdul-Malik al-Houthi.
Los ataques se llevaron a cabo sobre la base de una evaluación de que fuerzas hutíes intentaban escalar sus ataques contra Israel y rutas de navegación, informó la televisión estatal israelí Kan.
Jamal Amer, ministro de Relaciones Exteriores del gobierno hutí no reconocido, dijo en la red social X que el ataque israelí contra el Aeropuerto Internacional de Saná mató a dos empleados e hirió a algunos más, incluido el capitán asistente de un avión de la ONU que estaba a punto de transportar a funcionarios de la ONU, incluyendo al director general de la Organización Mundial de la Salud (OMS), Tedros Adhanom Ghebreyesus.
Amer dijo que el jefe de la OMS se encontraba en la sala VIP del aeropuerto cuando ocurrieron los ataques y que no se ha proporcionado información inmediata sobre su condición.
Un funcionario de los hutíes, en condición de anonimato, dijo a Xinhua que diez ataques aéreos israelíes destruyeron aviones de combate y helicópteros estacionados dentro de la base aérea de al-Dailami, adyacente al aeropuerto, que ha quedado fuera de funcionamiento.