El Instituto Nacional Electoral (INE) dio a conocer un formato preliminar para las boletas de la elección judicial, que, supuestamente, buscan reducir confusiones y facilitar el proceso electoral.
Las boletas están divididas por género y contendrán números para cada candidatura, en lugar de nombres. Cada boleta tendrá un color específico según el órgano judicial al que corresponda, lo que facilitará, según el INE, el conteo de votos, pero que causaría mucha confusión a la sociedad.
????️????⚖️ Formato nunca antes visto: así proyectan las boletas para la elección de jueces y magistrados
— Milenio (@Milenio) December 17, 2024
???? El INE prevé que, para reducir confusiones, la ciudadanía vote por género y con números, y no por los nombres de las candidaturas; en boletas clasificadas por colores para… pic.twitter.com/vXohk44Ynn
Pero si esto no fuera suficiente enredo, además, habrá dos tamaños de boletas, una de tamaño carta para la elección de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, magistraturas de circuito y juzgados de distrito; y media carta para los comicios de la Sala Superior y Salas Regionales del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación, así como del Tribunal de Disciplina Judicial.
Esta propuesta está dando mucho de qué hablar y generando preocupación, sobre todo por su complejidad y potencial para causar confusión entre los ciudadanos. Números, colores, tamaños y cargos son los ingredientes perfectos para enredar a los votantes. Según el INE, en un simulacro que ejecutó, el tiempo promedio de votación es de ocho minutos por persona, pero solo si el votante memoriza los más de 300 nombres de los candidatos. Una verdadera aberración.
En caso de ser aprobado este formato, sin duda representará un verdadero desafío, considerando su complejidad y la falta de conocimiento sobre los candidatos. Y es que la experiencia de las elecciones normales muestra que la gente llega a confundirse por la cantidad de partidos que abanderan a un mismo candidato y en muchas ocasiones, prefieren no emitir su voto de manera efectiva.
En el tema de las elecciones judiciales, la situación puede ser aún más complicada debido a la naturaleza técnica de los cargos, la falta de exposición mediática de los candidatos y, más ahora, con el enredo de las boletas. Esto podría llevar a una baja participación ciudadana y una falta de interés en votar por desconocidos.
En el mejor de los casos, podría darse una participación con total desconocimiento y, como se preveía, otorgarle el voto a candidatos que no cumplan con los conocimientos y la experiencia suficiente para poder acceder a un cargo judicial.
Aún está a la espera que el diseño de las boletas sea aprobado por la Comisión Temporal de la Elección Judicial y en el Consejo General del INE. Sin embargo, se prevé un desastre a pesar de la campaña de difusión que pretende llevar a cabo este órgano electoral a partir del próximo año para informar a la sociedad mexicana.
Esto representa una raya más al tigre de esta reforma al Poder Judicial, la cual ha causado mucha controversia desde su propuesta hecha por Andrés Manuel López Obrador en el sexenio pasado, y que ha provocado la desaprobación no solo de los trabajadores e integrantes de este poder autónomo, sino también de un gran sector de la sociedad.
