Cada 10 de diciembre, el mundo celebra el Día Internacional de los Derechos Humanos, una fecha que conmemora la adopción de la Declaración Universal de los Derechos Humanos (DUDH) por parte de la Asamblea General de las Naciones Unidas en 1948. Este documento marcó un hito en la historia al establecer derechos propios para todas las personas, sin distinción de raza, sexo, religión o condición. Sin embargo, ¿sabemos realmente cuáles son estos derechos y cómo nos protegen?
¿Qué son los derechos humanos?
De acuerdo con la ONU, los derechos humanos son inherentes a todas las personas. Incluyen el derecho a la vida, la libertad, la educación, el trabajo y a no estar sometido a esclavitud ni tortura. Estos derechos corresponden a todos sin discriminación alguna y son fundamentales para preservar nuestra dignidad.
“Cuando un derecho es vulnerado, todos los derechos se ven afectados.
— Naciones Unidas (@ONU_es) December 10, 2024
Protejamos, defendamos y promovamos todos los derechos humanos para todas las personas”.
– @antonioguterres en el #DíaDeLosDerechosHumanos. pic.twitter.com/yU8xrGkAFq
La Declaración Universal de los Derechos Humanos, junto con otros tratados internacionales, constituye lo que se conoce como la Carta Internacional de Derechos Humanos. Este marco legal protege derechos civiles, políticos, económicos, sociales y culturales a nivel global.
Los cimientos del derecho internacional
El derecho internacional de los derechos humanos impone obligaciones a los Estados para actuar de manera que promuevan y protejan estas garantías fundamentales. La ONU ha ampliado estas normas a través de tratados como:
- Convención sobre los Derechos del Niño (1989). Protege los derechos de los menores a la educación, salud y una vida libre de abusos.
- Convención sobre la Eliminación de Todas las Formas de Discriminación contra la Mujer (1979). Aboga por la igualdad de género y la erradicación de prácticas discriminatorias.
Además, mecanismos como el Examen Periódico Universal del Consejo de Derechos Humanos evalúan periódicamente la situación de los derechos humanos en los 193 estados miembros de la ONU, garantizando su promoción y respeto.
Los 30 derechos que nos protegen
La Declaración Universal está compuesta por 30 artículos que abarcan derechos civiles, políticos, económicos, sociales y culturales. Algunos de los más relevantes incluyen:
Derecho a la igualdad. Todas las personas tienen los mismos derechos sin importar raza, género, religión u origen.
No importa quien eres: el respeto y la dignidad son derechos universales que te pertenecen.
— Naciones Unidas (@ONU_es) December 10, 2024
✨ Valórate y exígelo. ✨
En este Día de los Derechos Humanos, reafirmamos que estos principios son tan fundamentales hoy como lo han sido siempre. https://t.co/gSsJ8wZFZE pic.twitter.com/z9KadcCXfi
Prohibición de la discriminación. Ninguna persona debe ser tratada de manera desigual por motivos arbitrarios.
Derecho a la vida, libertad y seguridad personal. Todos tienen derecho a vivir con dignidad, libres y seguros.
Prohibición de la esclavitud. La esclavitud y la servidumbre están prohibidas en todas sus formas.
Prohibición de la tortura. Nadie debe ser sometido a tortura ni a tratos crueles o degradantes.
Derecho al reconocimiento como persona ante la ley. Todas las personas tienen derecho a ser reconocidas y protegidas legalmente.
Igualdad ante la ley y derecho a la protección de la ley. La ley debe aplicarse de manera igualitaria y proteger a todos sin discriminación.
Derecho a un recurso efectivo. Si se violan tus derechos, tienes derecho a buscar justicia en los tribunales.
Prohibición de la detención, prisión o destierro arbitrarios. Nadie puede ser arrestado, encarcelado o expulsado injustamente.
Derecho a un juicio justo y público. Todas las personas tienen derecho a defenderse ante un tribunal imparcial.
Presunción de inocencia hasta que se pruebe culpabilidad. Eres inocente hasta que se demuestre lo contrario en un juicio justo.
Protección contra injerencias arbitrarias en la vida privada. Tu vida personal, familia y comunicaciones deben ser respetadas.
Derecho a la libertad de movimiento y residencia. Puedes moverte libremente dentro de tu país y salir de él si lo deseas.
Derecho de asilo frente a persecuciones. Puedes buscar protección en otro país si eres perseguido.
Derecho a una nacionalidad y a cambiar de nacionalidad. Toda persona tiene derecho a pertenecer a un país y, si lo desea, cambiar de nacionalidad.
Derecho al matrimonio y a la protección de la familia. Tienes derecho a casarte y formar una familia con igualdad de derechos.
Derecho a la propiedad individual y colectiva. Puedes poseer bienes solo o en asociación con otros, y nadie puede quitártelos arbitrariamente.
Libertad de pensamiento, conciencia y religión. Puedes tener tus propias creencias y practicarlas libremente.
Libertad de opinión y de expresión. Tienes derecho a expresar tus ideas sin miedo a represalias.
Derecho a la libertad de reunión y asociación pacífica. Puedes reunirte con otros de forma pacífica y formar asociaciones.
Derecho a participar en el gobierno. Tienes derecho a votar y a postularte para cargos públicos.
Derecho a la seguridad social. Los Estados deben garantizar apoyo para cubrir necesidades básicas como salud y vivienda.
Derecho al trabajo en condiciones justas. Puedes trabajar en un empleo digno con condiciones seguras y un salario justo.
Derecho al descanso y al ocio. Tienes derecho a vacaciones, tiempo libre y una jornada laboral razonable.
Derecho a un nivel de vida adecuado. Debes tener acceso a alimentos, vivienda, salud y bienestar para ti y tu familia.
Derecho a la educación. La educación básica debe ser gratuita y accesible para todos.
Derecho a participar en la vida cultural. Puedes disfrutar de la cultura, las artes y los beneficios del progreso científico.
Derecho a un orden social justo. Los derechos deben poder ejercerse en un entorno que los respalde.
Deberes hacia la comunidad. Tienes responsabilidades con los demás y debes respetar sus derechos.
Prohibición de usar los derechos para suprimir otros derechos. No se puede usar un derecho para violar o limitar los de los demás.