El presidente de Rusia, Vladímir Putin, firmó este sábado la ley que prohíbe incentivar a las personas a no procrear, fenómeno conocido también como 'childfree'.
La ley prohíbe, en particular, difundir la propaganda 'childfree' en Internet, medios de comunicación, películas y publicidad.
Los autores del documento son la presidenta del Consejo de la Federación (Senado ruso), Valentina Matvienko, el presidente de la Duma de Estado (Cámara Baja del Parlamento ruso), Viacheslav Volodin, así como diputados y senadores del país.
Aprobado antes por la Duma de Estado rusa y por el Senado ruso, con el apoyo de 162 senadores y un voto en contra, fue enviado para la firma del presidente ruso.
La firmada ley prevé responsabilidad administrativa y una multa de 50.000 a 100.000 rublos (entre unos 500 y 1.000 dólares al cambio actual) para las personas físicas; de 100.000 a 200.000 rublos para los funcionarios públicos; y de 800.000 a un millón de rublos para las personas jurídicas.
Las sanciones son aún superiores si las violaciones implican el empleo de medios de comunicación o Internet, así como si se cometen entre los menores de edad: entre 200.000 y 400.000 rublos para las personas físicas; entre 400.000 y 800.000 para los funcionarios públicos; y entre dos y cinco millones para las personas jurídicas.
Los ciudadanos extranjeros estarán sujetos a multas, así como a un arresto por un período de hasta 15 días y la deportación.
Al mismo tiempo, la promoción del monacato, celibato y renuncia a la procreación por motivos religiosos no están prohibidas si se basan en las normas internas de las organizaciones religiosas centralizadas.
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