El arte contemporáneo volvió a sorprender al mundo después de que la obra titulada “Comedian” del polémico artista Maurizio Cattelan, un plátano pegado a una pared con una cinta adhesiva, alcanzó un precio récord de 6.2 millones de euros en una subasta organizada por Sotheby’s en Nueva York.
El comprador es Justin Sun, un empresario chino del mundo de las criptomonedas, quien no solo compró la obra, sino que planea convertirla en parte de una experiencia artística. “En los próximos días voy a comerme personalmente la banana como parte de esa experiencia artística única, honrando así su lugar en la historia del arte y la cultura popular”, comentó el empresario.
#AuctionUpdate: Maurizio Cattelan’s iconoclastic 'Comedian' has captivated the world once again—this time in the #SothebysNewYork salesroom. The world’s most notorious banana just sold for $6.2M. #SothebysNOW pic.twitter.com/6bOSz0k5b0
— Sotheby's (@Sothebys) November 21, 2024
“Comedian” se presentó por primera vez durante la feria Art Basel de Miami en 2019, donde generó polémica luego de venderse en tres ediciones por un precio de entre 108,000 y 137,000 dólares cada una. En la instalación, el público hacía filas para fotografiarse con ella, convirtiéndose en una obra viral e inspiración para memes, mercancía y performances como el del artista David Datuna, quien se comió uno de los plátanos expuestos.
“Para mí ‘Comedian’ no era una broma, sino una reflexión sobre lo que valoramos. Puedo vender un plátano como otros venden cuadros; juego dentro del sistema, pero con mis reglas”, aseguró Cattelan durante su exposición en el museo Guggenheim de Nueva York.
Look up David Datuna, who ate one of those bananas ???? pic.twitter.com/SoGhbhArQn
— Misa (@xixmisaxix) November 21, 2024
A pesar de que Sotheby’s estimaba un precio inicial de 1.5 millones de dólares, la obra logró superar todas las expectativas y se consolidó como el plátano más caro del mundo. Además del plátano y el pedazo de cinta adhesiva, Sun recibió un certificado de autenticidad y la recomendación del artista para cambiar la fruta aproximadamente cada seis o siete días para mantener la perpetuidad del concepto que compró.
“Representa un fenómeno cultural, un puente entre los mundos del arte, los memes y la comunidad cripto”, comentó el comprador.
La simplicidad de esta obra trascendió para convertirse en un fenómeno cultural que cuestiona las normas tradicionales del arte e inspiró a otros artistas modernos creativos, como el chileno Sebastian Errazuriz, quien creó un consolador pegado a la pared con cinta adhesiva y lo vendió por 12,000 dólares.