Vasectomía y ligadura de trompas: entre mitos, desinformación y riesgos

Vasectomía y ligadura de trompas: entre mitos, desinformación y riesgos

Foto: FreePik

El tercer viernes de noviembre se celebra el Día Mundial de la Vasectomía con el objetivo de crear conciencia sobre la vasectomía como una alternativa anticonceptiva para los hombres que ya no desean tener más hijos.

 

La vasectomía en el caso de los hombres, y la ligadura de trompas de Falopio en las mujeres, son procedimientos anticonceptivos quirúrgicos cuyo objetivo es evitar el embarazo, pero presentan algunas diferencias.

 

La vasectomía consiste en cortar o bloquear los conductos deferentes en los hombres, evitando que los espermatozoides salgan del cuerpo. Por su parte, la ligadura de trompas de Falopio corta o bloquea las trompas de Falopio en las mujeres, impidiendo que los óvulos sean fertilizados.

 

En el caso de los hombres, la cirugía es sencilla. Se lleva a cabo bajo anestesia local y no requiere hospitalización, ya que es un procedimiento ambulatorio. Por otro lado, en las mujeres, el procedimiento quirúrgico requiere anestesia general y hospitalización.

 

Ambos métodos tienen un porcentaje de eficacia muy alto, superior al 99 %. Sin embargo, la vasectomía es reversible en algunos casos, aunque no está garantizado. Por su parte, la ligadura de trompas es generalmente irreversible.

 

Diferencias en los riesgos y recuperación

 

Los riesgos asociados a la vasectomía son menores, ya que pueden incluir dolorinflamación o infección, los cuales suelen ser leves. En cambio, la ligadura de trompas presenta riesgos más graves, ya que implica trabajar cerca de vísceras y existe la posibilidad de complicaciones serias, además de infecciones durante o después de la cirugía.

 

En cuanto al tiempo de recuperación, la vasectomía tiene una recuperación rápida, con pocos días de descanso. En cambio, la ligadura de trompas requiere varias semanas de reposo.

 

Mitos sobre la vasectomía

 

La desinformación ha generado una serie de mitos en torno a este procedimiento, los cuales conviene aclarar:

 

  • Pérdida de eyaculación: Durante una vasectomía se bloquean o cortan los conductos deferentes, que son los tubos por donde salen los espermatozoides para unirse con otros fluidos de la vesícula seminal y la próstata, formando el semen. Como la vasectomía solo bloquea el paso de los espermatozoides, seguirás produciendo semen y podrás eyacular igual que siempre. Tu semen tendrá el mismo aspecto y textura; la única diferencia es que no contendrá espermatozoides, por lo que no podrás embarazar a nadie.
  • Pérdida de erección: La vasectomía no afecta las erecciones ni la capacidad de tener orgasmos.
  • Produce cáncer: No existen estudios que demuestren que la vasectomía aumenta el riesgo de cáncer.
  • Afectación a los niveles de testosterona: La testosterona es una hormona que se transporta a través de la sangre, por lo que la vasectomía no afecta sus niveles.
  • Afectación al deseo sexual: La vasectomía no afecta el deseo sexual, las hormonas ni el placer. De hecho, para muchas personas mejora su vida sexual, ya que elimina la preocupación de un embarazo no planeado.
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