Pese a la gran exhibición que la semana pasada nos brindó el subsecretario Eduardo Clark sobre cómo las adquisiciones del Sector Salud ahora sí van a ser prístinas, la Secretaría de la Defensa Nacional se prepara para asignar un contrato teledirigido de equipamiento de Imagenología por un monto de 300 millones de pesos.
La licitación, en efecto, ya tiene dueña. Se trata de Claudia Cuellar, quien previamente ya resultó adjudicada por un contrato de 400 millones similar, y no se cansa de presumir su cercanía con su tocaya Sheinbaum. Por si fuera poco, menciona que ella “va a ser la proveedora del sexenio”.
Ya en el pasado, con ese mismo argumento, logró grandes contratos no solamente en SEDENA, también en el ISSSTE y en el IMSS.
Le adelanto, incluso, que ya hasta se sabe que el fabricante de los equipos también ya fue seleccionado. Es Phillips, un proveedor y su director general muy cercanos a Cuellar.
¿Cómo le hicieron para teledirigir el concurso? Muy sencillo, solamente existe un equipo, muy sobrado, por cierto, que cumple con las características del tomógrafo solicitado, con lo cual amarraron las bases.
Así que solo Phillips y su socia Claudia Cuellar pueden cumplir con las características demandadas por los militares.
¿Sera que la SEDENA está exenta de los lineamientos de la Secretaría de Salud y de su subsecretario Clark? ¿O todo lo que han mencionado es solamente una bola de humo, y las cosas siguen como siempre?
Lo peor es que, en este caso no hay un Andy a quien echarle la culpa.
Entonces ¿quién apoya a Claudia Cuellar en la SEDENA?
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En la 4T se la pasan “planeando”
Primero fue el “Plan A” de AMLO que tronó como ejote, luego de que la SCJN lo declarara inconstitucional.
Alfabéticamente, siguió el “Plan B” que corrió la misma suerte.
Y entonces, a la mala –supermayoría legislativa, desacatos, supremacía constitucional, etc.—se aprobó y se puso en marcha el “Plan C”.
Pero hete aquí que la presidente formal Claudia Sheinbaum ya tiene listo, dijo en su mañanera de este lunes, ¡otro plan!
O más bien, un par de planes.
Uno, en caso de que este día la Suprema Corte de Justicia de la Nación declare parcialmente inconstitucional la susodicha reforma que deforma al Poder Judicial.
Y otro plan en caso de que le den luz verde a las ocurrencias, berrinches y caprichos de AMLO y que fielmente ejecutan Sheinbaum y los morenistas en los órganos legislativos.
¿Es el Plan D? ¿Acaso el Plan E?
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Desobedecer al tirano AMLO, quien ordena desde las sombras, es pecado mortal entre los cuatroteros. El castigo sería el infierno de la anatematización.
Por eso, puede haber un prolongado paro de los integrantes del Poder Judicial, marchas, manifestaciones y, como dijo Carlos Salinas de Gortari, ni nos ven ni nos oyen a los mexicanos que conocemos los riesgos que corren la República, la democracia, las finanzas y la economía del país.
Apenas ayer, sin ser todavía presidente de EU, Donald Trump ya le lanzó la primera amenaza directa a la señora Sheinbaum, por temas relativos a la migración.
¡Espérense a que él o su contrincante Kamala Harris, cualquiera de ambos que lleguen a la Casa Blanca, amenace por temas comerciales a causa de las varias violaciones al T-MEC en materia de justicia, de acceso a la información, de competencia, de…!
¿A cualquiera de ellos dos si lo oirán y lo verán estos dizque defensores de la soberanía?
@AndySKBrown1
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