La influencer portuguesa Joana Mascarenhas fue condenada a dos años y seis meses de pena suspendida, luego de que confesara haber metido a su hija de tres años y medio al agua fría para que dejara de hacer berrinches.
De acuerdo con la jueza a cargo del caso, este método se trata de una forma de solución forzada y “no es una forma de cuidado”, por lo que además de una indemnización de 1,082 dólares para su hija, cumplirá el plan que la Dirección General de Reinserción y Servicios Penitenciarios le elaboraron.
Joana Mascarenhas, quem ganhou, quem ganhou? ???? pic.twitter.com/I3Kbd2r8dh
— Selada de Fruta (@seladadefruta) October 18, 2024
Según los reportes, la influencer confesó sus actos de violencia doméstica a través de sus historias de Instagram. Estos actos ocurrieron entre mayo y junio de 2023, siendo el primero cuando sumergió a su hija hasta la barbilla en una piscina, y el segundo, cuando la metió a la regadera con agua fría para que se callara.
La influencer, de 36 años, aseguró que nunca quiso hacerle daño y que ahora maneja su enojo de diferentes maneras. Por su parte, Margarida Vaz, abogada de Mascarenhas, comentó que recurrirán la sentencia.