El pasado 24 de septiembre de 2024, la comunidad estudiantil de la Escuela Superior de Música (ESM) presentó un pliego petitorio con demandas urgentes dirigidas a las autoridades educativas y gubernamentales, en busca de soluciones que mejoren las condiciones de estudio y enseñanza en la institución. Las principales preocupaciones de los estudiantes giran en torno a la falta de mantenimiento de los instrumentos musicales, el deterioro de las instalaciones y la necesidad de actualizar los planes de estudio, entre otros aspectos.
De acuerdo con entrevistas realizadas por NotiPress, entre los puntos más destacados del pliego se encuentran la revisión de los instrumentos y la adquisición de nuevos, debido al mal estado de muchos de ellos. Según el estudiante Omar López, "son instrumentos inservibles, totalmente inservibles, rotos... inclusive instrumentos que son de calidad de juguete". Además, la comunidad pide mejoras en la infraestructura, como la reparación de cubículos y salas de estudio con problemas de humedad y desperfectos en ventanas y suelos, elementos que afectan tanto a los estudiantes como a los instrumentos.
En cuanto al ámbito académico, los estudiantes solicitan la actualización de los planes de estudio. De acuerdo con Omar López, los actuales planes datan de casi dos décadas, lo que provoca un desajuste con las necesidades actuales del ámbito musical: "ya tiene 19 años que se está enseñando de esa forma y la verdad es que los tiempos han cambiado". El petitorio de la comunidad estudiantil dirigido por entonces al presidente Andrés Manuel López Obrador consta de 28 puntos y se actualizó el 29 de septiembre de 2024
Por su parte, el maestro Jorge Uribe comparte esta inquietud, señalando que las actualizaciones de los planes de estudio fueron obstaculizadas debido a la imposición de directrices de las autoridades superiores. En sus palabras, "algunos maestros están participando en la creación de nuevos métodos... pero se han visto muy entorpecidos en la creación de nuevos planes de estudio". Esta imposición, asegura, genera malestar tanto en los profesores como en los estudiantes, quienes se ven afectados por decisiones que no consideran las necesidades específicas de la comunidad educativa.
Uno de los puntos en común entre los entrevistados es la crítica hacia la gestión de las autoridades actuales. Tanto Uribe como López mencionan que el doctor Luis Manuel Montes, quien funge como encargado del despacho de la dirección, asumió decisiones importantes sin una consulta adecuada. Montes fue impuesto tras declararse como desierto el proceso de auscultación luego de quedar descalificados todos los aspirantes presuntamente por no cumplir con el perfil. Según López, "nos parece para nada correcto... el manejo que ha estado llevando de imponer planes de estudio". En este contexto, Uribe agrega que Montes y las autoridades de la Subsecretaría General de Educación e Investigación Artística "obedecen exigencias que chocan con el gran conocimiento que tiene la plantilla de maestros".
La comunidad también demanda mejoras en las condiciones laborales de los docentes, un tema que preocupa tanto a estudiantes como a profesores. Uribe destaca que muchos maestros enfrentan una precariedad laboral importante, con contratos temporales que generan inestabilidad. "A nadie le gusta porque yo llevo 11 años trabajando en la escuela y no tengo posibilidad... de hacer que mi plaza sea fija". López señala que los estudiantes son conscientes de esta situación y afirmó que la comunidad estudiantil apoya a los maestros.
Aunque se lograron algunos avances parciales en un paro anterior en mayo de 2024, como el acceso a insumos básicos, la comunidad estudiantil sigue demandando una transformación estructural que garantice no solo la calidad educativa, sino también un entorno digno tanto para alumnos como para profesores. (Notipress)
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