El presidente de Rusia, Vladimir Putin, ha advertido que utilizará armas nucleares en caso de percibir una amenaza crítica a la soberanía rusa. Durante la apertura de la reunión del Consejo de Seguridad de la ONU, el mandatario aseguró que podría utilizar armas nucleares si es atacado por cualquier Estado y que cualquier ataque convencional que fuera apoyado por una potencia nuclear, sería considerado un ataque conjunto.
Pero está no ha sido la primera vez en los últimos años que se habla de un posible ataque con armas nucleares. En un documento aprobado en marzo, el presidente Joe Biden ordenó a las fuerzas de Estados Unidos que se preparan para posibles enfrentamientos nucleares coordinados con Rusia, China y Corea del Norte. De igual forma durante más de dos años, el gobierno ruso ha jugado regularmente la carta de la amenaza nuclear con la esperanza de frenar el apoyo occidental a Ucrania. El año pasado, Corea del Norte amenazó con usar armamento nuclear ante la llegada de portaviones a Corea del Sur.
Esta postura de Rusia se da en el Día Internacional para la Eliminación Total de las Armas Nucleares, que tiene como objetivo promover la conciencia sobre los riesgos que representan las armas nucleares y la necesidad de su eliminación total. El 26 de septiembre se eligió para recordar la primera resolución aprobada por la Asamblea General de las Naciones Unidas en 1946, que identificó el desarme nuclear como un objetivo principal de la organización.
Sin embargo y a pesar del Tratado de No Proliferación Nuclear signado en 1968, que buscaba detener la propagación de armas nucleares, se permitió que cinco países conservaran sus arsenales, con la promesa de reducirlos progresivamente, lo cual no ha sucedido.
El primer país en desarrollar y usar armas nucleares fue Estados Unidos. Se estima que posee actualmente alrededor de 5,244 ojivas.
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Rusia es el país con el mayor número de ojivas nucleares en el mundo, el último reporte en 2023 señalaba que contaba con alrededor de 5,889.
En tercer lugar está China, que posee alrededor de 410 ojivas, aunque se piensa que en los últimos años ha aumentado su capacidad nuclear.
Francia mantiene un arsenal de unas 290 ojivas, con un enfoque en la disuasión nuclear, defendiendo su capacidad como una garantía de independencia y seguridad estratégica.
Con 225 ojivas, el Reino Unido cierra el grupo de los 5 países que tienen permitido conservar su arsenal nuclear.
Pero además de este grupo de naciones oficiales, hay un grupo de países que también cuentan con armamento nuclear que han desarrollado fuera del marco del Tratado de No Proliferación Nuclear como son:
India actualmente posee entre 160 y 170 ojivas, bajo el pretexto de que forma parte de su política de disuasión, especialmente frente a Pakistán.
Por ende, Pakistán ha desarrollado sus propias armas nucleares en respuesta al programa nuclear de India. Se estima que cuenta con entre 170 y 180 ojivas.
Aunque nunca se ha confirmado públicamente la posesión de armas nucleares, se estima que Israel posee entre 80 y 90 ojivas.
Se estima que Corea del Norte tiene entre 40 y 50 ojivas nucleares y está desarrollando capacidades de misiles intercontinentales.
¿Qué diferencias hay entre las armas nucleares y las convencionales?
Las armas nucleares y las armas convencionales tienen diferencias significativas en términos de su impacto, propósito y consecuencias. Las armas nucleares tienen una potencia destructiva mucho mayor que las armas convencionales. Una sola arma nuclear puede destruir una ciudad entera, mientras que las armas convencionales requieren una gran cantidad de explosivos para lograr un daño similar.
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Por otro lado, las armas nucleares emiten radiación ionizante, que puede causar daños graves a los seres humanos y al medioambiente, mientras que las armas convencionales no emiten radiación. De igual manera, un arma nuclear tiene un gran radio de destrucción y pueden causar daños colaterales extensos, en tanto las armas convencionales tienen un radio de destrucción más limitado.
El impacto al medioambiente también es notorio, ya que mientras las armas convencionales no generan algo significativo, las armas nucleares provocan un devastador daño, desde contaminación radiactiva hasta efectos en el cambio climático. Otra gran diferencia es que las armas nucleares suelen utilizarse como un elemento disuasorio para prevenir conflictos, mientras que las armas convencionales se utilizan para propósitos militares más tradicionales.
Actualmente, hay más de armas nucleares que en décadas pasadas; las sociedades modernas dependen de infraestructuras críticas como redes eléctricas, sistemas financieros y hospitales, que son vulnerables a los efectos de las armas nucleares; la exposición a la radiación nuclear podría tener efectos más graves en la salud pública debido a la mayor densidad de población y la interconexión global y un conflicto nuclear tendría un impacto devastador en la economía global, debido a la interdependencia económica y el comercio internacional.
