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La sequía y su prolongada duración están reduciendo el nivel de los afluentes del río Amazonas. Tres de sus principales afluentes han alcanzado niveles que se encuentran entre los más bajos de la historia, revela un informe del Servicio Geológico de Brasil (SGB).
Conforme a los datos de la institución, el nivel de los ríos Solimoes, Madeira y Acre está por debajo de lo normal.
En la zona de Tabatinga, el Solimoes registró el 13 de septiembre su caudal más bajo desde 1983, de 1,79 metros. En otras zonas, ese río también se encuentra en una situación crítica: en la estación de Itapeua, el nivel era de 2,3 metros, el tercero más bajo de la historia, por detrás de los 1,46 metros de 2023 y los 1,3 metros de 2020, mientras que en Fonte Boa está en 10,16 metros, el octavo más bajo de la historia.
De acuerdo con estos datos, el río Madeira se situó en 0,60 metros en Porto Velho, la cota más baja de su historia desde 1967. El río Acre, en la ciudad de Río Branco, se encuentra en 1,28 metros, el segundo más bajo de la historia, por detrás de la marca de 1,24 metros registrada en 2022. El río Negro también está en fase de bajada, alcanzando 16,75 metros en Manaus. Esta marca está 3,7 metros por debajo del rango considerado normal para el período, detalla el SGB.
En opinión del gerente de Hidrología y Gestión del Territorio de la Superintendencia Regional de Manaus (SUREG-MA) del SGB, Andre Martinelli, "no hay previsiones de mejora a corto plazo, y la tendencia es que el nivel del río siga bajando en los próximos días".
En cuanto a otros ríos, el nivel del río Tapajós en la zona de Itaituba también es el más bajo desde 1968. Por su parte, el último nivel observado del río Amazonas en Óbidos fue de 1,17 metros, el más bajo desde 1967.
"El nivel de agua de los ríos se vio afectado por la falta de precipitaciones durante el año. La vegetación seca, debido a la falta de lluvias, crea condiciones favorables para los incendios", explicó Artur Matos, coordinador nacional del Sistema de Alerta Hidrológica (SAH).
