La relación comercial entre México y Estados Unidos es la más importante en la región de América del Norte. Desde la implementación del Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC), ambos países mantuviern una cooperación económica que genera beneficios mutuos, convirtiéndose en principales socios. Sin embargo, las elecciones presidenciales de noviembre de 2024 en Estados Unidos, con Donald Trump como candidato republicano y Kamala Harris como candidata demócrata, plantean diferentes perspectivas sobre el futuro de esta relación.
Juan Carlos Baker, académico de la Universidad Panamericana, compartió con periodistas su visión sobre lo que está en juego en la relación entre Estados Unidos y México según el escenario del futuro presidente estadounidense. En un conversatorio con periodistas al que fue invitado NotiPress, el exsubsecretario de Comercio Exterior de la cartera de Economía en tiempos de la negociación del T-MEC, reveló aspectos clave del futuro en caso de ganar Trump o Harris.
Donald Trump: pros y contras
Pros:
- Continuidad en temas proteccionistas: Durante su mandato anterior, Donald Trump implementó medidas proteccionistas que, aunque polémicas, forzaron una revisión del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN), dando lugar al T-MEC. Para ciertos sectores de la industria estadounidense, como el automotriz, estas políticas impulsaron la producción interna, lo que podría mantenerse si Trump es reelegido.
- Posible renegociación de acuerdos: Trump ha demostrado interés en renegociar acuerdos comerciales para obtener mejores condiciones para Estados Unidos. Esto podría significar ajustes en las reglas del T-MEC, lo que podría favorecer a industrias estadounidenses que compiten con productos mexicanos.
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Contras:
- Riesgo de tensiones arancelarias: La administración Trump recurrió a la imposición de aranceles como herramienta de presión, algo que generó incertidumbre en el pasado. Si bien se evitó una guerra comercial total, una reelección podría reactivar el uso de aranceles contra productos mexicanos como el acero o los automóviles, afectando la competitividad de México. Durante la campaña presidencial, Trump mantuvo el posicionamiento de poner aranceles como herramienta de negociación.
- Política migratoria estricta: Las tensiones migratorias entre ambos países podrían impactar la relación comercial. En su primer mandato, Trump utilizó la amenaza de aranceles para presionar a México en cuestiones migratorias, lo que podría repetirse, generando inestabilidad en los mercados.
Kamala Harris: Pros y contras
Pros:
- Políticas comerciales más estables: Harris podría mantener una relación comercial más predecible y menos confrontativa con México. Los demócratas suelen favorecer acuerdos multilaterales y la cooperación internacional, lo que podría beneficiar la estabilidad del T-MEC y reducir las tensiones arancelarias.
- Impulso a las energías renovables: Bajo la administración Harris, se podría esperar un mayor enfoque en energías renovables, lo que abriría oportunidades de inversión y colaboración para México en sectores como la energía solar y eólica, donde el país tiene potencial de crecimiento.
Contras:
- Aumento de regulaciones ambientales y laborales: Una administración demócrata podría poner mayor énfasis en la implementación de regulaciones ambientales y laborales dentro del T-MEC. Esto podría significar mayores costos de cumplimiento para las empresas mexicanas, particularmente en sectores industriales y de manufactura.
- Posible reducción de inversión en sectores tradicionales: Harris podría desincentivar la inversión en sectores como el energético tradicional (petróleo y gas), donde México aún depende en gran medida. Esto podría generar fricciones en la colaboración entre ambos países, especialmente si las políticas energéticas de México no se alinean con la visión ambiental de la administración Harris.
La relación comercial entre México y Estados Unidos seguirá siendo un pilar fundamental para ambas economías, pero el enfoque dependerá del resultado de las elecciones de noviembre 2024. Mientras Donald Trump ofrece un enfoque más proteccionista y orientado a renegociar acuerdos, Kamala Harris promueve una relación más estable y con un énfasis en regulaciones laborales y ambientales. Ambas visiones presentan oportunidades y riesgos para México, por lo que la administración de Claudia Sheinbaum juega una de sus mejores piezas en la Secretaría de Economía con Marcelo Ebrard. (Notipress)
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