Cientos de manifestantes que rechazan el proyecto de reforma al Poder Judicial ingresaron al atardecer del martes al salón de sesiones del pleno del Senado de México, y el presidente de la Cámara alta, el oficialista Gerardo Fernández Noroña, decretó un receso para resguardar la seguridad de los legisladores.
"Senadores y senadoras, tenemos información de que ingresó un número de manifestantes al interior de este inmueble. Están en la explanada principal, estoy recabando la información con resguardo de la situación existente (…), se decreta un receso indefinido, se levanta la sesión", dijo el presidente del Senado al percatarse del ingreso de estas personas.
Medios locales reportaron al menos dos personas lesionadas en el forcejeo por el ingreso a la sede senatorial, un hecho inédito en la historia de la Cámara alta mexicana.
Los manifestantes que lograron ingresar por la fuerza a la sede del Senado y el salón de sesiones del pleno legislativo de 128 curules son trabajadores de los tribunales del Poder Judicial. Los inconformes están en paro nacional indefinido desde el 21 de agosto pasado contra el proyecto de reforma para, entre otras medidas, elegir por voto popular las altas cortes y unos 6,000 jueces federales.
Manuel Añorve, coordinador de la bancada del opositor Partido Revolucionario Institucional (PRI, centro) anunció que la bancada de su partido se mantendrá en la sala de sesiones o en el edificio senatorial.
En un hecho inédito, los manifestantes en contra de la Reforma al Poder Judicial entran al Senado de la República:
— Francisco Burgoa (@FranciscoBurgoa) September 10, 2024
¡El Poder Judicial no va a caer, no va a caer!
¡El Poder Judicial no va a caer, no va a caer!
¡El Poder Judicial no va a caer, no va a caer! pic.twitter.com/XvboOPvdo6
El PRI, junto con los opositores Partido Acción Nacional (PAN, centroderecha) y Movimiento Ciudadano (MC, socialdemócrata) batallan por mantener un bloque de 43 votos para contener el esfuerzo de la bancada oficialista de alcanzar los 86 votos que le den la mayoría calificada requerida para cambiar la Constitución.
Los partidos de oposición denunciaron presiones y acoso del oficialismo para obligar a algunos de sus legisladores a aprobar una reforma constitucional del Poder Judicial y de obligarlos con chantajes a sumarse a la coalición gobernante para alcanzar los sufragios para ser una súper mayoría requerida, de dos terceras partes del Senado.
Los manifestantes abrieron un boquete en una de las puertas del salón de sesiones del Senado para ingresar al pleno, mientras que agentes de seguridad trataban de contenerlos.
Hamlet Almaguer, consejero nacional del gobernante Movimiento de Regeneración Nacional (Morena), calificó a los manifestantes como "golpistas" y los comparó con los seguidores del expresidente de EU, Donald Trump, que tomaron el Capitolio en enero de 2021 para impedir el desenlace de los comicios que ganó Joe Biden.
He dado instrucciones para que servicios parlamentarios convoque a la reanudación de la sesión a las siete de la noche en la antigua sede del @senadomexicano, conocida como la Casona de Xicoténcatl. Habrá reforma al poder judicial.
— Fernández Noroña (@fernandeznorona) September 10, 2024
El presidente del Senado, el legislador Noroña, dijo a periodistas que la sesión se reanudará a partir de las 19:00 horas (01:00 GMT), en el antiguo edificio del Senado, un edificio del Centro Histórico de la capital en la calle Xicoténcatl.
"Aquí se hará la continuación de la sesión con todo el mundo. Está convocado todo el mundo, insistí que salieran del salón de sesiones", dijo el titular de la directiva senatorial al noticiario de Radio Fórmula. Noroña denunció que hubo una "operación hormiga" de la oposición, con la finalidad de que los manifestantes ingresaran al Senado.