Groenlandia fue azotada por un megatsunami hace un año y nadie se percató

Groenlandia fue azotada por un megatsunami hace un año y nadie se percató

Foto: Freepik

El 16 de septiembre de 2023, un megatsunami azotó las costas de Groenlandia, causando un fenómeno que captó la atención de la comunidad científica internacional. Con olas que alcanzaron los 200 metros de altura, este extraordinario evento golpeó el remoto fiordo de Dickson Fjord, dejando a su paso una ola estacionaria que duró varios días.

 

El megatsunami fue provocado por un deslizamiento de tierra en una zona remota de Groenlandia. Afortunadamente, no hubo pérdidas humanas, ya que la zona afectada estaba deshabitada. Sin embargo, el impacto fue captado por las estaciones de monitoreo de terremotos, ubicadas a más de 5,000 kilómetros de distancia, registrando señales sísmicas que duraron mucho más allá del evento inicial.

 

Investigadores del centro Geoscience (GFZ) en PostdamAlemania, dirigidos por Angela Carillo Ponce, analizaron las señales sísmicas y descubrieron la presencia de una ola estacionaria de aproximadamente un metro de altura, la cual permaneció en el fiordo durante al menos una semana después del megatsunami. Esta ola fue detectada como una señal sísmica de larga duración (VLP) y se convirtió en un punto focal del estudio debido a su persistencia.

 

Los hallazgos fueron publicados en el estudio “The Seismic Record” y advierte que el rápido descongelamiento de los glaciares y el permafrost en las regiones polares y nórdicas aumenta las posibilidades de fenómenos como tsunamis y megatsunamis. Estos eventos están estrechamente ligados al cambio climático y plantean riesgos importantes para las áreas costeras.

 

En 2017, una avalancha en el fiordo de Karrat también desató un tsunami que inundó el municipio de Nuugaatsiaq, destruyendo casas y cobrando la vida de 4 personas; además de registrar una señal sísmica de larga duración.

 

La magnitud de las olas de este evento sorprendió a la comunidad científica, quienes la compararon con otros desastres naturales a gran escala, como el tsunami que devastó Tailandia en 2004 con olas que alcanzaron los 30 metros de altura, o el tsunami de 2011 en Japón, que alcanzó los 9 metros y causó una crisis nuclear.

Notas Relacionadas