Un total de 156.202 bebés nacieron en España en la primera mitad de 2024, un 25 por ciento menos que hace una década, según estimaciones publicadas hoy jueves por el Instituto Nacional de Estadística (INE).
A pesar del ligero incremento del 0,28 por ciento con respecto al mismo periodo del año pasado y experimentado este año, la tendencia en la última década fue a la baja, desde los 208.375 nacimientos del primer semestre de 2014.
El descenso más pronunciado de estos últimos diez años se observó entre 2020 y 2021, con una bajada del 6,4 por ciento en los nacimientos en el primer semestre y coincidiendo con la pandemia de la COVID-19.
Por edad de la madre, la mayor parte de las mujeres que tuvieron un hijo en la primera mitad de 2024, el 33 por ciento, tenían entre 30 y 34 años, seguidas por la franja de 35 a 39 años (29,7 por ciento).
Hubo además 14.525 nacimientos de madres de 40 a 44 años y 27.170 de madres de 25 a 29 años.
En cuanto a las defunciones en el primer semestre, se registraron 267.168, un 1,52 por ciento más que en el mismo periodo de 2023, cuando hubo 263.130. El dato es similar al registrado en años anteriores, excepto en 2020, cuando se alcanzaron los 304.421 fallecimientos, coincidiendo con la pandemia.
En 2023, España registró 322.075 nacimientos, la cifra más baja desde el comienzo de la serie histórica en 1941, de acuerdo con el INE.
Según los últimos datos de la oficina europea de estadística Eurostat, España fue en 2022 el segundo país de la Unión Europea con una tasa de fecundidad más baja, con 1,16 hijos por mujer, por encima de Malta (1,08 por ciento) y por detrás de Italia (1,24 por ciento).
De acuerdo con los expertos, entre los motivos de ese descenso continuado de nacimientos en España está el envejecimiento de la población y la dificultad de los jóvenes para acceder a un puesto de trabajo estable o una vivienda, lo que retrasa la edad de la maternidad.
