Triatletas que participaron en los Juegos Olímpicos de París se quejaron de agua sucia en el río Sena y de las condiciones injustas de la competición.
"Nadar en el Sena fue repugnante", dijo la deportista neerlandesa Rachel Klamer a la cadena de televisión RTL.
La triatleta agregó que la natación se había convertido en una lotería debido a una fuerte corriente en el río, y no descarto poder caer enferma, ya que ha tragado mucha agua durante la competición.
Otra triatleta neerlandesa, Maya Kingma, criticó en una entrevista con el canal televisivo NOS "tales riesgos en un evento tan importante".
Además, algunos atletas se sintieron mal durante o inmediatamente después de la competición.
"He hecho esto, no me arrepiento (...) vomité diez veces", dijo el canadiense Tyler Mislawchuk, citado por el diario Toronto Sun.
La deportista de la selección de Kazajistán Ekaterina Shabálina se retiró después de la primera etapa de la competición porque se puso enferma después de que tragara agua del Sena.
Además, de la organización de torneos y de la calidad del agua en el río se quejaron triatletas de España y Bélgica.
La competición de triatlón entre mujeres se celebró en París, a pesar de la cancelación de los entrenamientos y el traslado de la carrera masculina debido a la mala calidad del agua en el río.
La razón de la contaminación del agua es la lluvia que cayó anteriormente en la capital francesa.
En 1923 estuvo prohibido bañarse en el Sena por un decreto del prefecto, en particular, debido al alto contenido de Escherichia coli y otras bacterias patógenas.
Las autoridades parisinas informaron haber destinado cerca de 1.400 millones de euros para limpiar el agua y garantizar la seguridad para los atletas.
Las muestras tomadas a finales de junio mostraron que el agua era favorable para nadar.
Los Juegos Olímpicos de París se celebran del 26 de julio al 11 de agosto, mientras que los Juegos Paralímpicos tendrán lugar del 28 de agosto al 8 de septiembre.