Llegan las vacaciones de verano y muchas familias aprovechan esta temporada para alejarse de la rutina diaria y emprender un viaje a distintos destinos turísticos para descansar. Pero quienes no descansan en esta temporada son los ladrones, que aprovechan para cometer sus delitos.
De acuerdo con cifras del 2023 del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública, los delitos patrimoniales, como el robo en todas sus modalidades, tienden a aumentar durante julio y agosto, que tradicionalmente concentran el periodo vacacional.
La ausencia, así como el difundir que se estará lejos de casa, son parte de los factores de riesgo que son aprovechados por bandas delincuenciales para cometer crímenes sin dejar huella, eliminando la necesidad de la violencia.
En temporada de vacaciones, los índices de robo a casa habitación aumentan significativamente debido a que cientos de familias salen de la ciudad para dirigirse a otros estados, dejando su vivienda a merced de los criminales, quienes con toda la calma del mundo, aprovechan para cometer sus fechorías.
Datos de 2023 del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI) revelaron que el robo a casa habitación es uno de los delitos más recurrentes en México, tanto que la tasa de incidencia es de 1,704 casos por cada 100,000 habitantes en el país.
Por ello, como método de prevención, en esta temporada de vacaciones de verano, se debe informar a los vecinos de confianza que se saldrá para que puedan encender y apagar las luces de manera aleatoria, informar de algo inusual y recoger el correo. Además, no se debe avisar por redes sociales sobre el viaje ni publicar fotos al regreso.
De igual forma, el robo de autopartes y de vehículos se incrementa en esta temporada de vacaciones. Los propios delincuentes aprovechan esta temporada para "vacacionar" y vienen de otras entidades para cometer sus fechorías.
La llegada de visitantes de otros estados hace que la delincuencia ponga su atención en ellos, ya que son más vulnerables toda vez que se encuentran lejos de su lugar de origen y dentro de sus planes no está el ser víctima de un robo y todo lo que se deriva de ello.
El robo hormiga a centros comerciales y tiendas de conveniencia es otro de los delitos que incrementa de forma importante en la temporada vacacional. Los artículos que se roban van desde sandalias, lentes oscuros, trajes de baño, playeras, vestidos y todo lo necesario que requiere un turista; de igual forma, dulces, bebidas, bloqueadores, juguetes de playa. También se incrementa el robo de celulares, joyería, perfumería y relojes.
De acuerdo con la Encuesta Nacional de Victimización de Empresas ejecutada por el INEGI, el 78.3% de los delitos de robo a negocio no se denuncian, es decir, 8 de cada 10 de estos incidentes quedan impunes.
Quienes también están en riesgo durante esta temporada vacacional son las instituciones educativas. En este periodo se registra un incremento en los índices de robos y daños en las escuelas por falta de vigilancia adecuada. Equipos de cómputo, de sonido, mobiliario, así como cableado y tubos de PVC, son el blanco preferido de los ladrones en los centros educativos.