Aficionados y violencia en el futbol: la Copa América no fue la excepción

Aficionados y violencia en el futbol: la Copa América no fue la excepción

Foto: X / @Polemista4T

Este domingo culminó la Copa América 2024, con la coronación de Argentina como campeón del torneo continental. Sin embargo, los actos de violencia que se presentaron minutos antes del pitazo inicial se robaron el protagonismo.

 

Esto, después de que miles de aficionados, muchos sin boletos, burlaran la seguridad del estadio Hard Rock de Miami, superando ampliamente las capacidades de las fuerzas policiacas que habían sido contratadas para controlar el ingreso por los organizadores del evento.

 

Videos de usuarios en redes sociales, así como de las televisoras presentes a horas del inicio del partido final de la Copa América, mostraron una serie de incidentes que se registraron al abrir las puertas del estadio. Las imágenes muestran en varias ocasiones cómo grupos de personas corren para acceder al estadio, burlando la seguridad y algunos son confrontados por oficiales.

 

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Este tipo de incidentes, en el que los aficionados burlan los cercos de seguridad, no es nuevo, y mucho menos en el futbol. Recientemente, en abril de este año, la afición de Atlas aprovechó la única oportunidad de ver a su equipo a puertas abiertas y se saltó al terreno de juego para conseguir un autógrafo y una firma de sus ídolos. Cerca de 2,000 aficionados burlaron a los elementos de seguridad, quienes no pudieron contener a las personas. Afortunadamente, no hubo desgracias que lamentar.

 

En 2022, en Argentina, minutos antes del partido que enfrentaba a Gimnasia y Esgrima contra Boca Juniors, un numeroso grupo de aficionados comenzó a protestar por la imposibilidad de acceder al estadio. Este hecho provocó que muchos aficionados comenzaran a quejarse en la calle, lo que llevó a las fuerzas de seguridad a tomar posiciones. Todo explotó cuando un policía cargó contra una niña de 9 años. Este acto provocó la revuelta de los aficionados contra los agentes de seguridad, que respondieron con balas de goma y gases lacrimógenos, haciendo insostenible la situación.

 

Comenzaron a vivirse momentos dramáticos, avalanchas, gente huyendo mientras trataba de respirar, gente tirada por el suelo por los empujones y la falta de oxígeno. Una policía que cargaba y disparaba bolas de goma para tratar de contener la situación. El resultado fue de una persona fallecida, además de cuantiosos heridos.

 

 

En 2023, el partido entre Brasil y Argentina correspondiente a las eliminatorias para la Copa del Mundo terminó retrasado 30 minutos debido a una pelea entre aficionados y la policía en las gradas. Aficionados de ambas selecciones se enfrentaron, y la policía intervino de manera violenta.

 

En medio del caos, además del intercambio de golpes, se destruyeron y arrojaron sillas de un lado a otro. Los policías en el lugar utilizaron el tolete contra los aficionados involucrados en la pelea. Jugadores de ambos equipos se acercaron al lugar para pedir calma. Sin embargo, el ambiente agresivo continuó predominando entre argentinos y policías.

 

Ante todo el escenario, los jugadores de Argentina, liderados por Lionel Messi, se negaron a jugar debido a lo ocurrido y regresaron al vestuario. Después de que la situación fue controlada, con aficionados detenidos y algunos hospitalizados, el juego finalmente comenzó.

 

 

En marzo de 2022, se vivieron momentos de tragedia en el futbol mexicano durante el encuentro celebrado en el estadio Corregidora de Querétaro, entre los locales, Gallos Blancos y Atlas de Guadalajara.

 

En las imágenes, circuladas a través de redes sociales, se percibe que lo que comenzó como una pelea entre las porras de ambos equipos rápidamente escaló a un conflicto a mayor escala que, primero, provocó la suspensión del partido.

 

En los videos se alcanza a ver a aficionados del club Querétaro golpeando y desnudando a hombres que portaban la camiseta del equipo rival. Asimismo, dentro de la cancha, y ante la ausencia de los cuerpos de seguridad, los aficionados destruyeron mobiliario del estadio con el que comenzaron a golpear a otras personas.

 

 

En las gradas, familias que acudieron a observar el partido se encontraban aterrorizadas ante la violencia. A la vez, denunciaron que las autoridades no activaron protocolo alguno para resguardar a las y los aficionados.

 

Versiones extraoficiales aseguraron en un principio que el saldo de esta riña era de, al menos, 17 personas fallecidas. Tiempo después, negaron la existencia de personas muertas, únicamente 26 heridos de consideración.

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