La enfermera británica de 34 años, Lucy Letby, quien ya cumple cadena perpetua por el asesinato de siete bebés y el intento de asesinato de otros seis, fue declarada culpable de intentar asesinar a otra bebé durante febrero de 2016 en el hospital Countess of Chester en Inglaterra.
La condena de cadena perpetua vino después del veredicto que determinó que Letby intentó asesinar a la bebé prematura mediante la desconexión de su tubo para respirar la mañana del 17 de febrero de 2016. Por este crimen, Letby recibió nuevamente la pena máxima bajo la ley británica, ya que en Reino Unido la ley prohíbe la pena de muerte.
Serial killer Lucy Letby has been sent to her 15 whole life term today..
— London & UK Street News (@CrimeLdn) July 5, 2024
Mr Justice Goss told her that “she will spend the rest of your life in prison.”
As she was led out of the dock, Letby, who was dressed in black said in a quiet voice: “I’m innocent”. pic.twitter.com/99yi1yEjxY
De acuerdo con la fiscal Nicola Wyn Williams, la enfermera removió el soporte de respiración del bebé, cuando un médico entró y vio a la enfermera de pie viendo cómo el menor luchaba por su vida, lo que calificó como “acciones de una asesina fría y calculadora”. Además, señaló que Letby retiró el tubo en dos ocasiones más para encubrir sus actos y tratar de hacer creer a los demás que la primera vez que vieron el tubo fuera de su lugar fue un accidente.
Por su parte, el doctor Ravi Jayaram, aseguró ante los jurados que en ningún momento Letby intentó ayudar al bebé cuando la sorprendió a lado de la incubadora.
En su juicio de 2023, condenaron a cadena perpetua a Lucy después de ser declarada culpable de siete homicidios y seis intentos más en la unidad neonatal del hospital Countess of Chester entre 2015 y 2016. Según los fiscales, la mujer inyectó aire en los torrentes sanguíneos de los bebés, así como la administración de leche o aire en sus estómagos mediante el uso de tubos nasogástricos, además de envenenar a otros con insulina.
Durante el juicio por el asesinato de la Bebé K, Letby fue condenada nuevamente a cadena perpetua, por lo que no expresó emoción alguna durante la lectura del veredicto; sin embargo, al ser retirada del tribunal, la acusada continúo defendiendo su inocencia.