Durante la segunda mitad de 2023, el Océano Pacífico experimentó el fenómeno de El Niño, que aumentó la probabilidad de ciclones tropicales en esa región, mientras que en el Atlántico las condiciones eran contrarias. Para Alejandro Jaramillo Moreno, investigador del Instituto de Ciencias de la Atmósfera y Cambio Climático (ICAyCC), el cambio hacia La Niña está en marcha.
La transición hacia La Niña implica un enfriamiento de las aguas en el Océano Pacífico, cambiando la circulación del aire en la atmósfera y produciendo efectos opuestos a los de El Niño. Estos fenómenos ocurren cada dos a siete años y no siguen un patrón perfecto.
Actualmente, México se encuentra en una fase de transición hacia condiciones normales, donde las aguas calientes del Pacífico se desplazan hacia el oeste, cerca de la línea internacional de cambio de fecha, disminuyendo la temperatura del Océano Pacífico central tropical. Aunque las probabilidades apuntan a una alta posibilidad de La Niña para los meses de julio a septiembre, aún no se puede confirmar con certeza la intensidad del fenómeno.
Sin embargo, los pronósticos para México sugieren que podría ser de moderada a fuerte. Según la Comisión Nacional del Agua, se pronostican de 15 a 18 sistemas en el océano Pacífico, de los cuales ocho o nueve podrían ser tormentas tropicales, cuatro o cinco huracanes categorías 1 o 2, y tres o cuatro fenómenos de nivel 3 a 5. En el Atlántico, se pronostican de 20 a 23 sistemas, con una estimación de cinco que podrían afectar a México.
La Niña genera situaciones muy diferentes en el norte y centro de México en comparación con el sur. Durante ésta podríamos esperar un poco más de lluvia de lo normal en el sur, suroeste y sureste, Pero el norte del país será más seco" indicó Alejandro Jaramillo Moreno, investigador del Instituto de Ciencias de la Atmósfera y Cambio Climático (ICAyCC).
En resumen, aunque El Niño se disipa, el pronóstico para la temporada de ciclones tropicales 2024 sigue siendo activo, especialmente en el Atlántico, con la posibilidad de impactos significativos en México. La vigilancia y la preparación es fundamental para enfrentar esta temporada, que se espera más activa de lo habitual en el Atlántico, mientras que en el Pacífico podría ubicarse dentro de la media. (NotiPress)