Desde hace años, México es un país que vive en medio de la polarización y la división social, una situación que se acentúa cuando hay procesos electorales, pues es cuando se dan más discrepancias en la política. Tras las elecciones del 2 de junio, los ganadores de la contienda llamaron a la reconciliación de cara a lo que viene en el país para el próximo sexenio.
La presidenta electa de México, Claudia Sheinbaum Pardo, dijo que en su gobierno apelará a la armonía y a la paz, por lo que buscará la reconciliación política incluso con los que fueron sus adversarios. Esto lo dijo en su primer discurso como mandataria electa, agradeciendo a Xóchitl Gálvez y Jorge Álvarez Máynez, sus rivales en la contienda, por haber reconocido su triunfo.
Además de ella, otros ganadores como Clara Brugada, jefa de Gobierno electa en la Ciudad de México, Alejandro Armenta Mier, gobernador electo de Puebla, y Pablo Lemus de Jalisco, han hecho el mismo exhorto a la reconciliación y paz entre ellos y sus rivales políticos. En muchos casos los candidatos que perdieron aceptan el llamado, aunque se ha visto este escenario y la realidad cambia con el tiempo.
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Por años, especialmente desde que inició el sexenio de Andrés Manuel López Obrador, el país se ha polarizado y no deja de haber disputas entre los diferentes bandos políticos. Esto no ha sido todo, ya que además de la constante división entre los políticos, también está la polarización social que se incrementa conforme llega cada proceso electoral.
Lo anterior se ha notado más luego de que se dieron a conocer los resultados de la elección del domingo pasado, ya que hubo sectores de la población a los que no les gustó la extensión de la 4T. Las redes sociales se llenaron de mensajes y hashtags como “#QueLesAyudeMorena”, para no dar apoyos o dejar propinas a quienes lo necesiten por, según quienes lo promueven, votar por dicho partido.
En este contexto, la virtual presidenta electa de México ha ofrecido desarrollar un gobierno incluyente en los próximos seis años, en el que, asegura, también tendrán voz y cabida aquellas personas que no respaldan su proyecto. De igual forma, dijo que no sólo se concentrará en aquellos que le dieron la preferencia en las urnas, sino que velará por el bienestar de todos los mexicanos.
A este mensaje se suman algunos gobernadores virtualmente electos de Morena, quienes llaman a la unidad y la reconciliación con todos los sectores políticos y sociales de México. En primera instancia, los políticos de oposición se han mostrado abiertos a tener más diálogo y, en términos generales, a conciliar más con quienes ganaron las elecciones, pero esto no garantiza que se vaya a cumplir.
Y es que la reconciliación es más que una forma de convivencia entre la sociedad y los grupos políticos, pues tiene que ver con la vida pública del país. De acuerdo con el académico de la UPAEP, Juan Pablo Aranda Vargas, lograr la reconciliación en nuestro país es importante porque esto fortalece la democracia, por lo que es una de las principales tareas en la política nacional del próximo gobierno.
Ahora, a menos de cuatro meses de que inicie el sexenio de la primera mujer presidenta de México, su principal reto será hacer una tarea de reconciliación en todo el país, especialmente con sus detractores. Esto no sólo beneficiaría a su futuro gobierno, sino a la oposición que a partir del 2024 quedará prácticamente reducida en la mayoría de los espacios.
En cuanto empiece la transición de un sexenio a otro y hasta que se dé la toma de protesta del gobierno de izquierda en México, el principal pendiente para la nueva presidenta será crear un ambiente más conciliador. De igual forma, tendrá que cambiar el entorno de confrontación que se dio a lo largo del sexenio de AMLO en el que, por ejemplo, en ningún momento intentó dialogar con los líderes de oposición.