"Hot Sale" es la campaña de ventas online más grande del país, que reúne a las mejores empresas de venta y servicios online. Se celebra en México desde el 2014 y es organizado por la AMVO (Asociación Mexicana de Venta Online).
Este evento se ha convertido en una de las principales plataformas para impulsar el comercio electrónico en el país. De acuerdo con la página oficial del evento, el Hot Sale 2024 se llevará a cabo desde este 15 al 23 de mayo.
Participan más de 600 marcas, entre las que destacan Coppel, Liverpool, Smart Fit, Sanborns, Home Depot, Sears, Adidas, Sam's Club o CyberPuerta. También participan Mercado Libre, Mercado Pago y Amazon.
Los bancos también tienen promociones durante el Hot Sale, como bonificaciones o compras a meses sin intereses.
"Meses sin intereses": la forma más fácil de perder el control de las compras
Y es precisamente de esta forma que a las personas se les hace fácil comprar todo a "meses sin intereses" y pierden el control. Empiezan a gastar más de lo que ganan y pueden hacerlo porque ese financiamiento les permite usar dinero que no tienen, pero que esperan ganar en el futuro. Algunos pierden el control y no se dan cuenta. En esto, desde luego, entra la falta de cultura financiera.
También podemos sumar otro factor que es el mal otorgamiento del crédito. Muchos bancos prácticamente "regalan" tarjetas de crédito a gente que no tiene capacidad de pago.
La empresa de gestión Bravo, antes llamada Resuelve tu Deuda, precisa que el 61 % de los mexicanos viven sobreendeudados derivado de una falta de educación financiera.
Añade que la deuda promedio de las personas en 2023 fue de 174,792 pesos, 16 % mayor a la de 2022. Lo anterior, debido en gran parte a la falta de educación financiera, lo que provoca que las personas no manejen un presupuesto partiendo de lo básico: cuánto ganan y cuánto gastan.
El Buró de Crédito es una institución privada que se encarga de recolectar y proporcionar información crediticia de personas y empresas a las instituciones financieras y de crédito. Además, es considerado una herramienta importante para la toma de decisiones financieras en México. Está constituido como una Sociedad de Información Crediticia autorizada por la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) y cuenta con la opinión de la Comisión Nacional Bancaria y de Valores (CNBV) y el Banco de México.
En el Buró de Crédito están todas aquellas personas que han obtenido alguna tarjeta de crédito, crédito automotriz, hipotecario, algún servicio de telefonía o televisión de paga. Estar en el Buró de Crédito significa contar con un historial crediticio que muestra tanto los pagos puntuales y adecuados como los atrasados.
El historial crediticio es el registro del comportamiento financiero de cada persona, tomando en cuenta la cantidad de créditos o tarjetas que haya solicitado. A cuánto ascienden sus deudas pendientes o si paga puntualmente. Se trata de un informe que concentran empresas como Buró y Círculo de Crédito, el cual lleva el registro de todos los financiamientos solicitados y el comportamiento de pago. Éste es revisado por los bancos u otras empresas antes de otorgar un crédito.
De acuerdo con el último reporte de la Encuesta Nacional Financiera (ENIF), en 2021, de las personas de 18 a 70 años, 27.4 millones tenían al menos un crédito formal, cifra que equivale a 32.7 % de la población en este rango de edad. Respecto a 2018, el indicador aumentó 1.6 puntos porcentuales.
De este número, alrededor de tres o cuatro de cada 10 mexicanos cuentan con un historial "negro" en el Buró de Crédito, lo cual les impide obtener financiamiento principalmente de la banca nacional, de acuerdo con la firma Bravo.
La gente compra cosas que no necesita, con dinero que no tiene
Gran parte de lo que compran las personas en este tipo de campañas como Hot Sale, no es realmente necesario, y la mayoría de las veces lo hace a través de créditos bancarios, es decir, con dinero que no tiene y que en un futuro espera tenerlo.
La cultura de consumo puede ofrecer los medios para establecer y expresar identidad, además de obtener una sensación de poder. Muchas de las compras son para cubrir necesidades concretas, pero también hay esas compras que no se sabe muy bien por qué y para qué se hicieron.
Estas compras están impulsadas por varias razones; algunas veces, simplemente porque se puede, aunque no se tenga (efectivo); otras porque se ve en la compra una oportunidad a futuro, especialmente cuando es una "oferta" tentadora y otras veces porque la causa de este consumo está entrelazada con cuestiones sicológicas.