A pesar de que en los últimos años la empresa Nokia quedó relegada en el lanzamiento de celulares, su más reciente anuncio causó revuelo por tratarse de un modelo icónico: el Nokia 3210. Este es un teléfono que solía usarse hace años, pero hoy buscan revivirlo apelando a la nostalgia de la gente, una estrategia que se ha vuelto la norma para vender todo tipo de productos.
Si bien no será como se le recuerda, el Nokia 3210 será un modelo con una batería de larga duración, bluetooth, red 4G y el emblemático juego de la “viborita” que hace años hizo pasar largos ratos de diversión a los usuarios. Este lanzamiento será 25 años después de que el mundo vio el original, haciendo así que siga creciendo el mercado de la nostalgia.
The OG 'Nokia 3210' is coming back after 25 years!#Nokia #Nokia3210 pic.twitter.com/t0WddjRjaQ
— Smartprix (@Smartprix) April 29, 2024
Además de celulares, también se ha vuelto común que series, películas, juguetes y demás artefactos de otra época regresen para despertar ese sentimiento en los diferentes públicos que en su momento los disfrutaron. El mercado de la nostalgia se convirtió en uno que constantemente revive un producto añejo para recrear esos momentos y experiencias de un tiempo mejor.
¿Por qué vende tanto la nostalgia?
La nostalgia es ese anhelo de volver a experimentar nuestros recuerdos más felices y, al mismo tiempo, añorar el pasado con sentimientos mezclados de alegría o tristeza. La alegría se da por el hecho de rememorar los momentos más importantes de nuestra vida, mientras que la tristeza obedece a la imposibilidad de regresar a esos sucesos sin importar lo que hagamos o cuánto lo queramos.
En este sentido, al aplicarlo en la mercadotecnia, la nostalgia se encarga de crear un vínculo emocional entre el consumidor y la marca que vuelve a lanzar un producto de otra época, por lo que las empresas buscan generar esta emoción, ya que con ella también viene la necesidad de tratar de revivir momentos felices a como dé lugar.
Con esto, evocando recuerdos de mejores momentos, las empresas hacen que los consumidores revivan experiencias positivas que compartieron al lado de un producto suyo. Música, películas, videojuegos, lugares, sabores, personajes e incluso olores, son parte de las formas en las que evocan las marcas para apelar a los sentimientos de los clientes.
Neurológicamente, cuando experimentamos la nostalgia en el cerebro se dan fuertes estimulaciones a la amígdala y en la corteza prefrontal medial, lo que influye en nuestra toma de decisiones gracias a la interferencia de los procesos memorísticos y la experimentación de emociones.
La nostalgia vende tan bien porque se enfoca en atacar las fibras más íntimas de sus clientes, lo que conecta con sus momentos felices del pasado y ofrece un escape del presente que puede ser agobiante. Para las marcas es la mejor oportunidad de forjar conexiones reales con los consumidores y mantener vigentes productos clásicos que eran desconocidos para las nuevas generaciones.
Usar este sentimiento como una estrategia no siempre trae resultados positivos para las empresas, ya que si se apela a ella y genera emociones negativas, el producto a ofrecer no tiene el impacto deseado.
Los ejemplos de la nostalgia aplicada a la mercadotecnia son varios, no sólo el icónico celular de Nokia, sino que también existen casos como el de Pokémon GO. Este juego para celular fue lanzado en 2016 para revivir el furor por una de las caricaturas, y también un videojuego, muy querido por todas las generaciones.
Hoy en día Pokémon GO es jugado por más de 80 millones de personas, pero en sus primeros años de lanzamiento alcanzó más de 1,000 millones de descargas y jugadores que se organizaban en grupo para ir a atrapar pokemones en tiempo real.
También están las franquicias de películas a las que constantemente les dan reinicios o se les crean precuelas y secuelas con tal de rememorar sus mejores momentos. “Terminator”, “Los cazafantasmas”, “Jurassic Park”, “Rambo” o “Rocky” son el claro ejemplo de cómo las productoras apelan a la nostalgia para mantenerse vigentes.
Finalmente, un lanzamiento similar al del Nokia 3210 se dio el año pasado con el relanzamiento del Walkman en enero del 2023. El objetivo era volver a vender un producto que fue innovador en su tiempo, pero se volvió obsoleto con el paso de los años, aunque con las actualizaciones que lo hacían más funcional para esta época.