De acuerdo con la Asociación Mexicana de Afores (Amafore), las Administradoras de fondos para el retiro (Afores) son entidades financieras dedicadas a administrar las cuentas individuales de ahorro para el retiro de los trabajadores.
Dichas entidades deben contar con la autorización de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público y están sujetas a la regulación de la Comisión Nacional del Sistema de Ahorro para el Retiro (Consar).
La Ley del Sistema de Ahorro para el Retiro, así como lo dispuesto en la Ley del Seguro Social, indica que los retiros de la Afore solamente se podrán llevar a cabo por vejez, cuando se haya llegado a los 65 años y reunido al menos 500 semanas de cotización; por cesantía en edad avanzada, cuando el trabajador haya llegado a los 60 años, no tenga un trabajo remunerado y haya reunido al menos 500 semanas de cotización en el IMSS.
Asimismo, se pueden hacer retiros parciales por ayuda para gastos de matrimonio, por ayuda de desempleo y de las aportaciones voluntarias.
Pero ¿qué sucede con el dinero que no es reclamado por beneficiarios o trabajadores?
La Ley del Seguro Social, en su Artículo 302, refiere que el derecho del trabajador o pensionado y, en su caso, de sus beneficiarios a recibir los recursos de la subcuenta de RCV es imprescriptible. Sin embargo, en caso de que hayan pasado 10 años sin que la cuenta haya sido reclamada por el trabajador, pensionado o beneficiarios, el IMSS podrá disponer de dichos recursos.
La Comisión Nacional del Sistema del Ahorro para el Retiro (Consar), en su último reporte, puso a disposición del IMSS 946.2 millones de pesos que pertenecen a las subcuentas de Retiro, Cesantía en Edad Avanzada y Vejez (RCV) de trabajadores que han fallecido o que no han retirado su dinero una vez que llegaron a la edad de retiro.
Sin embargo, la Ley de Seguridad Social establece que el IMSS tendrá que constituir una reserva suficiente para atender las solicitudes de devolución de los trabajadores, pensionados o beneficiarios.
Por lo que, de los casi 950 millones de pesos, se han devuelto 14.6 millones pesos. Es decir, que de las 265,785 cuentas puestas a disposición del instituto de seguridad social, sólo 257 han sido reclamadas para la devolución de los recursos.
Esto, a propósito de que los diputados Ignacio Mier y Angélica Cisneros proponen que el Fondo de Pensiones del Bienestar se alimente con recursos de trabajadores que no han cobrado su pensión y que tengan más de 70 años.
Para ello, proponen una reforma a la Ley del Seguro Social (para obtener los recursos de quienes cotizaron ante el IMSS), otra reforma a la Ley del ISSSTE (para obtener los recursos de las personas trabajadoras del Estado) y otra más a la Ley del Infonavit (para tener los recursos que administra ese Instituto).
La propuesta señala que el dinero de los trabajadores que cotizaron ante el IMSS, con 70 años cumplidos y que no han hecho su trámite de pensión, pasará automáticamente al Fondo de Pensiones del Bienestar.
Para los trabajadores del ISSSTE, el dinero se traspasará de la misma forma, sólo que de los trabajadores con más de 75 años.