Exactamente en dos meses los mexicanos acudirán a las urnas para elegir a sus representantes populares, siendo lo más destacado la posibilidad de que una mujer sea presidenta de la República por primera vez. Sin embargo, a nivel local se elegirán otros cargos como las presidencias municipales y, con ellos, también los regidores de cada ayuntamiento.
En Puebla, por ejemplo, ayer el candidato de Morena para la alcaldía de la capital, José Chedraui Budib, presentó oficialmente a su planilla de regidores, mientras que Mario Riestra Piña, candidato del PAN, hizo lo propio hoy. La figura de los regidores es una de las más importantes para un ayuntamiento, por lo que los ediles siempre buscan posicionar a perfiles cercanos a ellos o a sus partidos.
A pesar de su importancia, para muchas personas todavía resultan desconocidas las funciones de un regidor, así como la forma en que son elegidos y lo que aportan a un ayuntamiento. Ahora que estamos a las puertas de un nuevo proceso de elección de representantes, los regidores cobrarán mayor relevancia en el papel
Los regidores, al igual que otros cargos, son representantes populares y de acuerdo a la Ley Orgánica Municipal su principal función es la de analizar, resolver, evaluar, controlar, vigilar y supervisar el actuar del gobierno municipal. De igual forma, parte de sus tareas son vigilar el correcto funcionamiento de los servicios públicos que brinda el ayuntamiento y de la administración municipal.
Otra labor de los regidores es la de presentar propuestas para modificar, crear o eliminar partes de los reglamentos municipales, o en su caso, modificarlos en su totalidad, siempre buscando el bien mayor de los ciudadanos. Para esto forman parte de un cabildo, que es el máximo órgano de un gobierno municipal y en el que está el alcalde, por lo que están obligados a asistir a todas las sesiones del mismo.
Al igual que los diputados del Congreso hacen con el gobierno estatal, los regidores participan en la elaboración del presupuesto de ingresos y egresos del ayuntamiento. Dentro del cabildo también existen comisiones referentes a áreas de relevancia, como salud, deporte, economía y turismo, entre otros. Es su deber celebrar las sesiones necesarias y asistir a ellas en tiempo y forma.
Respecto a sus limitaciones, los regidores tienen estrictamente prohibido hacer gestiones administrativas ante autoridades federales, estatales y municipales sobre cualquier asunto que afecte los intereses del ayuntamiento, a menos que esto le sea autorizado por el cabildo o el presidente municipal.
Ahora bien, en lo que concierne a su elección en Puebla estos van integrados en una planilla que es inscrita por el candidato a presidente municipal y son asignados de acuerdo al número de votos obtenidos. En la capital del estado hay un total de 16 regidores de mayoría más el presidente y el síndico, mientras que en municipios de 70,000 o más habitantes sólo habrá ocho regidores de mayoría, y en el resto habrá seis regidores.
No obstante, aquí también se aplica el principio de mayoría relativa, que en el caso de Puebla capital es de siete regidores, en los de 90,000 o más habitantes se habilitan cuatro espacios, entre 60,000 a 90,000 habitantes habrá tres, y en el resto se darán únicamente dos espacios. Estas regidurías se repartirán entre los partidos minoritarios que hayan obtenido al menos el 2 % de la votación en el municipio.
Para la asignación de regidores de representación proporcional se seguirá el orden con el que fueron inscritos por los candidatos en las planillas correspondientes, a excepción de quienes estuvieron en el primer lugar de la regiduría, quienes hayan sido candidatos a presidente municipal o al síndico. Esto es en el caso de Puebla, pero en otros estados los regidores también son elegidos por el voto directo de la gente.
Si bien la figura de los regidores no es del todo conocida para la sociedad, esta resulta importante porque son el enlace más directo e inmediato de la gente con sus gobernantes municipales. Por lo anterior, los regidores tienen la obligación de pensar en el beneficio de los ciudadanos que los eligieron directa o indirectamente, mediante sus decisiones y propuestas en el cabildo.
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