Cuando se trata de introducir una mascota en casa, se tiene que poner atención en varios aspectos importantes, como la adaptación a la convivencia con niños y adultos, así como la interacción que tendrá con otros animales y la adecuación de espacios para su comodidad. Sin embargo, un factor de suma importancia que suele pasarse por alto es la salud ambiental para los perros y los gatos en casa.
Los expertos señalaron que al igual que los padres evitan exponer a sus hijos al humo del tabaco, los dueños de mascotas deberían tomar medidas similares, ya que el sistema respiratorio de los animales es vulnerable a los efectos nocivos del humo. Tanto la nicotina, como el monóxido de carbono y el alquitrán, sustancias presentes en el humo de los cigarros, pueden afectar tanto a los fumadores como a los seres vivos que los rodean, especialmente si se fuma en espacios cerrados.
El llamado “humo de tercera mano”, que está compuesto por las sustancias químicas del tabaco que se acumulan en las superficies con el paso del tiempo, también representa un riesgo para las mascotas, debido a que estas sustancias pueden irse acumulando en el pelaje de las mascotas y ser ingeridas durante su acicalamiento, lo que afecta principalmente a los gatos. Por otro lado, los perros pueden sufrir de problemas respiratorios debido a la inhalación del humo.
Ante esta situación, la veterinaria Angels Gómez, advirtió que existen varios estudios que evidencian el aumento de cánceres y neoplasias en mascotas que fueron expuestas al humo de manera pasiva, presentando síntomas como tos, taquicardia, fatiga o disnea, por lo que recomendó a los dueños evitar fumar dentro de la casa y acostumbrarse a hacerlo en el exterior.
La salud ambiental de las mascotas es uno de los principales aspectos a considerar para garantizar el bienestar de estas en casa, y protegerlos del humo del tabaco es una medida importante para preservar su salud a largo plazo.