La inteligencia artificial (IA) mostró avances en el diagnóstico de lesiones después de un accidente vascular cerebral (AVC), según un estudio de Neurology Clinical Practice, órgano oficial de la Academia Americana de Neurología. Un accidente cerebrovascular es causa significativa de discapacidad y mortalidad, pues plantea desafíos para la localización precisa de las lesiones cerebrales.
Conocer la ubicación exacta de un accidente cerebrovascular resulta crucial para anticipar consecuencias a largo plazo, tales como dificultades en el habla, el lenguaje o la movilidad de partes del cuerpo. Así, el estudio, liderado por Jung-Hyun Lee, MD de la Universidad Estatal de Nueva York (SUNY), evaluó el potencial de la IA, específicamente el modelo de lenguaje GPT-4, para localizar un accidente cerebrovascular.
Lee explica que la IA procesó datos de historiales médicos y exámenes neurológicos de 46 casos de AVC. Los resultados revelaron que GPT-4 logró identificar con precisión la ubicación y la región de las lesiones cerebrales en la mayoría de los casos. Además, obtuvo una sensibilidad del 74% y una especificidad del 87% para la ubicación lateral, así como una sensibilidad del 85% y una especificidad del 94% para la región cerebral.
Este estudio, aunque prometedor, reconoce limitaciones en la disponibilidad y calidad de los datos, lo que afecta la precisión de la IA. Sin embargo, Lee señala el potencial transformador de la IA, no solo en la localización de lesiones, sino también en la reducción de disparidades en la atención médica.
Si bien, el estudio aún no está listo para su implementación clínica, este avance resalta el papel creciente de la inteligencia artificial en la medicina artificial en la medicina. Mediante nuevas perspectivas para mejorar el diagnóstico y tratamiento de enfermedades neurológicas, como el AVC. (Notipress)