El colectivo Mujeres Libres y Soberanas demandó a los senadores de la República de todas las corrientes políticas votar en contra del proyecto legislativo de terapias de conversión ya que, consideraron, pone en peligro los derechos de los padres de familia a decidir en libertad la educación, formación y tratamientos médicos o terapéuticos de sus hijos.
Angélica Pérez del Valle, vocera del colectivo, afirmó que “los menores de edad están bajo el cargo de sus padres a través de la patria potestad. El Estado no puede coartar el derecho de los padres a la educación, formación y protección de los hijos. Los padres de familia son quienes tienen la obligación y el derecho de velar por su salud física y mental”.
En el pleno de San Lázaro el pasado viernes 22 de marzo, con 276 votos a favor y 104 en contra se avaló la ley para eliminar las “terapias de conversión”. De la cámara de diputados ahora pasará al Senado para su aprobación o desacuerdo.
La iniciativa de ley prevé que sancionará a quién realice, imparta, aplique, obligue o financie cualquier tipo de tratamiento, terapia, servicio o práctica que obstaculice, restrinja, impida, menoscabe, anule o suprima la orientación sexual, identidad o expresión de género. El proyecto legislativo incrementa al doble la sanción cuando las conductas se realicen en menores de edad, por eso el colectivo de mujeres realizó el llamado a los senadores para detener lo que llamaron un atentado contra la libertad de las familias.
Pilar Vázquez Calva, también vocera de Libres y Soberanas explicó que “los ciudadanos mexicanos adultos tienen la libertad de decidir cuáles y qué tipo de terapia quieren recibir y esto debe ser garantizado por el Estado. El Estado no puede intervenir en las decisiones de cualquier adulto en cuanto a su salud mental y qué tipo de terapia psicológica o psiquiátrica considere apropiadas”.
La activista denunció que está en peligro la libre práctica de varias disciplinas como la psicología y la psiquiatría, entre otras. “Lo que un paciente decida de manera libre y privada con su tratante debe ser respetado. Nos preocupa que la libertad de los profesionistas de la salud mental sea limitada, atacada y amenazada con cárcel”.
Urgieron a los Senadores de la República a que voten en contra de este proyecto legislativo que pone en peligro derechos de los padres, derechos de los pacientes y derechos de los profesionistas de la salud mental.
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