Por primera vez en la historia, una cría de tiburón blanco fue capturada a los pocos momentos de nacer. Las imágenes fueron grabadas mientras el cineasta de la vida silvestre Carlos Gauna y el estudiante de biología Phillip Sternes filmaban a los escualos con un dron en la costa de Santa Bárbara, California, en julio de 2023.
Unos días antes del rodaje, Gauna, también conocido por el seudónimo de The Malibu Artist, había visto a varias hembras presumiblemente embarazadas en la misma zona, por lo que un inusual tiburón de color blanco que aparecía en la superficie del agua llamó su atención.
"Aquel día, una de ellas [hembras] se sumergió y, no mucho después, apareció este tiburón totalmente blanco. No es difícil deducir de dónde salió el bebé", señaló el cineasta.
Los tiburones blancos (carcharodon carcharias) suelen ser grises por encima y blancos por debajo. El tiburón recién nacido avistado por los observadores era de color completamente blanco.
"A pesar del intenso interés por estos tiburones, nadie ha visto un nacimiento o una cría recién nacida en libertad", afirmó Sternes.
Por el momento, no hay confirmación definitiva de que el animal que aparece en las imágenes sea una cría de tiburón blanco recién nacida. Sin embargo, los investigadores presentaron algunos argumentos y teorías en su artículo científico que fue publicado en enero de 2024.
El pequeño tamaño del tiburón y sus aletas redondeadas, similares a las de un embrión, indican que la cría tenía entre unas horas y unos días cuando las imágenes fueron grabadas. Aunque también se merece la atención el poco tiempo que transcurrió entre la sumersión de una hembra embarazada y la posterior aparición de la cría recién nacida.
Gauna y Sternes también observaron que una capa blanquecina se desprendía mientras el escualo nadaba.
"Creo que era un tiburón blanco recién nacido desprendiéndose de su capa embrionaria", señala Sternes.
Sin embargo, cabe destacar que este fenómeno también puede ser signo de una enfermedad cutánea o incluso de albinismo.
Estimaron que el animal tenía 1,5 metros de longitud, el mismo tamaño que una cría de esta especie. Si el mismo espécimen vuelve a ser avistado, será posible comparar cómo ha cambiado su piel con el paso del tiempo y cuánto ha crecido, explicaron los investigadores.
El descubrimiento de una cría de tiburón blanco podría ser una señal importante para garantizar una protección adecuada de esta zona acuática, ya que la especie está en peligro de extinción.
"Es necesario seguir investigando para confirmar que aquella área es realmente un criadero de tiburones blancos. Pero si es así, nos gustaría que los legisladores protegieran estas aguas para contribuir a que los tiburones blancos sigan prosperando", concluyó Sternes.
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