Cómo sucede con cada inicio de año, la gente empieza a sufrir la llamada “cuesta de enero”, por lo que las finanzas personales se complican y planes como empezar a ahorrar se tornan complicados. Es por esto que en los últimos años han surgido múltiples formas para comenzar a formar el hábito del ahorro, para que aquellas personas que lo sienten casi imposible lo logren fácil y sin afectar al bolsillo.
Ahorrar dinero y mejorar las finanzas personales en sí, suele ser uno de los principales propósitos de año nuevo, pero al mismo tiempo es uno de los más complicados para la mayoría de personas. Es por esto que surgieron los llamados “retos de ahorro”, es decir, populares y muy efectivas dinámicas para lograr el objetivo de hacer que el dinero rinda más.
Dichos retos abarcan diferentes lapsos y diversos montos de ahorro para que las personas puedan adaptarse y dar pie al ahorro sin que esto afecte en sus finanzas. Aquí una lista de algunos retos de ahorro que son básicamente pequeñas metas que se pueden cumplir cotidianamente y que incluso resultan divertidas para llegar a la meta del ahorro.
Reto de las 52 semanas
Este es un reto que se recomienda iniciar en la primera semana del año, o si ya van varios días de este, hacerlo hasta cumplir con las 52 semanas. Consiste en algo sencillo, que es empezar una semana ahorrando una cifra pequeña, que pueden ser diez pesos, y de ahí, sumar diez más cada ocho días, lo que significa que a la segunda se ahorran 20 pesos, la tercera 30, la cuarta 40 y así el resto del año.
Conforme avanzan las semanas la cifra se puede complicar un poco, ya que en la semana 52 se deberían guardar 520 pesos en un sólo tanto, pero el resultado final sería más grande del creído, pues se tendrían aproximadamente 13,780 pesos. Cabe destacar que no es necesario esperar a la primera semana del año, ya que se puede hacer en cualquier momento y seguir así hasta llegar a la meta de las 52
Reto de los 30 días
Si todo lo anterior no resulta posible por los montos elevados que se dan conforme avanza el año, se pueden adaptar plazos más pequeños con cantidades mucho más pequeñas, pero que al concluir también dan una cantidad considerable de ahorro.
La otra forma de hacer este reto es con plazos diarios que lleven la misma dinámica, pero con el ahorro de un peso al día por cada mes. El primer día se guarda un peso, el segundo dos, el tercero tres, y así sucesivamente hasta el día 30, cuando se llega a la cifra de 30 pesos, algo mucho más asequible. Al final de cada mes se podrían tener cerca de 465 pesos, por lo que al año serían 5,580 pesos de ahorro.
Diez pesos y una botella
Para tenerlo en un lugar seguro y a la vista donde siempre se pueda depositar, hay otro reto en el que solo se necesita una botella de plástico de 2.5 litros y ahí se irán depositando diariamente las monedas de diez pesos. A lo largo del día solo se tiene que cumplir el desafío de no gastar las monedas de ese valor, para que al final del día se guarde y ver cuánto se junta al final, cuando esté llena.
Quizá en el transcurso del día se tenga que gastar una o dos monedas, pero lo ideal es llegar al final de la jornada con el mayor número posible para seguir con el reto. La botella de 2.5 litros es la idónea porque se estima que con esas dimensiones la cifra final suele alcanzar un aproximado de 10,000 pesos.
Casi 60,000 pesos en 365 días
Para llevar a cabo este solo es necesaria la disciplina y llevar bien el conteo de los días. En varios papelitos se deben anotar los números de los días de todo el año, desde el uno hasta el 365, o 366 este año y, posteriormente, estos se depositarán en un frasco o botella en la que se puedan sortear. Diariamente se sacará un papel y en una alcancía o cualquier depósito se abonará la cifra que indique el papel, que puede ir de uno a 365 pesos.
A diferencia del reto de las 52 semanas, con este van a quedar cifras más asequibles y se tiene un ahorro final que puede alcanzar hasta los 66,795 pesos al final del reto. Para esto lo más importante es la constancia y la disciplina para hacer el sorteo diariamente.
La importancia de ahorrar
Cada inicio de año las personas se proponen, entre otras metas, mejorar su economía personal, ya sea para salir de las deudas que tanto aquejan, para tener un monto extra en caso de emergencias, o bien, solo para darse un gusto al final del año. Es por esto que el hábito del ahorro resulta más relevante si no se desean adquirir nuevas deudas, pues se puede emplear el dinero con el que ya se cuenta de manera más organizada e inteligente.
Ahorrar nos brinda mayor tranquilidad y estabilidad financiera, ya que se forma un “colchón financiero” con el que se afrontan los gastos inesperados de mejor manera. Con esto también se logran metas planteadas a corto, mediano y largo plazo, como proyectos, personales, con nuestra familia o laborales.
El hecho de ahorrar en sí también representa una forma de forjar características como la disciplina, el autocontrol, la constancia y el orden, algo que luego se puede traducir a otras áreas de la vida. Es por esto que todos podemos empezar a ahorrar en la medida de nuestra posibilidades, sin comprometer nuestra economía y mejorándola a futuro.
