El Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (Unicef) alertó este lunes que existe un "alarmante" aumento de las muertes en niñas, niños y adolescentes en Ecuador en un 640 por ciento en los últimos cuatro años.
"Este alarmante aumento en las muertes por violencia armada continúa impactando severamente las vidas de niños, niñas y jóvenes en Ecuador", indicó Unicef en un informe difundido simultáneamente por el organismo desde Panamá y Estados Unidos.
El documento, que cita estimaciones del Ministerio del Interior de Ecuador, precisa que al menos 770 homicidios de niños, niñas y adolescentes fueron registrados en el país en 2023, lo que implica "un aumento drástico del 640 por ciento con respecto a los 104 casos en 2019".
"En los últimos meses, las muertes de niños, niñas y adolescentes han aumentado drásticamente debido a un incremento dramático del crimen en varias partes de Ecuador. También se reporta un aumento del reclutamiento forzado de adolescentes por parte de grupos armados y las instalaciones médicas y las escuelas están bajo asedio", señaló Garry Conille, Director Regional de Unicef para América Latina y el Caribe, citado en el informe.
Conille indicó que la interrupción de servicios básicos en áreas controladas por grupos armados no sólo pone a más niños en riesgo de ser reclutados, sino que también corta el acceso a la salud, educación y protección para otros cientos de miles.
Unicef añadió que, además de la situación de la niñez, preocupa el creciente número de personal médico, maestros y directores de escuelas amenazados, extorsionados y asesinados por grupos armados.
El informe menciona que actualmente, debido al empeoramiento de la situación de seguridad, el cierre temporal de las escuelas en todo el país privó a más de 4,3 millones de niños, niñas y adolescentes de servicios educativos adecuados.
"Unicef está listo para apoyar a las autoridades en la reapertura de escuelas tan pronto como las condiciones mejoren y sigue comprometido en apoyar al Gobierno ecuatoriano, a las comunidades y las familias", precisó.
El organismo internacional instó a todas las partes a garantizar que los niños, niñas y adolescentes de Ecuador sean protegidos de la violencia armada en todo momento y recuperen el acceso a servicios sociales básicos como salud, protección y educación.
Mencionó que en Ecuador, Unicef trabaja para empoderar a los jóvenes con habilidades en resolución de conflictos y prevención de la violencia, apoyar a los educadores y establecer centros de apoyo que ofrecen servicios psicosociales y legales, y además, en conjunto con el ministerio de Educación, apoya el "Plan de Escuelas Seguras" para mejorar la prevención de violencia y el cuidado de la salud mental.
En 2023, Ecuador registró más de 7.000 muertes violentas, récord que superó las más de 4.500 reportadas en 2022, entre ellos menores de edad y adolescentes, incluidos los que se consideran víctimas colaterales e incluso algunos integrantes de bandas delincuenciales, un fenómeno que ha comenzado a preocupar a la sociedad.
