La variante Pirola de COVID-19, detectada por primera vez en Perú a finales de noviembre, ha causado alarma entre las autoridades sanitarias por su alta transmisibilidad y su resistencia a algunas vacunas.
Síntomas:
Los síntomas más comunes de la variante Pirola son fiebre alta, tos seca, dolor de cabeza, pérdida del olfato y del gusto, y dificultad para respirar.
Si hacemos una comparación, encontramos que estos síntomas son similares a los de la variante original de COVID-19 y a los de la variante Alfa, que se originó en Reino Unido.
Pero la variante Pirola también presenta otros síntomas menos frecuentes pero más graves, que pueden indicar una mayor afectación de los órganos internos. Estos síntomas son dolor abdominal, diarrea, vómitos, sangrado nasal, erupciones cutáneas y alteraciones neurológicas como confusión, convulsiones o pérdida de la conciencia.
De acuerdo con los expertos, esta sintomatología es más parecida a la de la variante Beta, que se originó en Sudáfrica, y a los de la variante Gamma, que se originó en Brasil.
Recomendaciones:
Los médicos recomiendan a la población que, ante la aparición de cualquiera de estos síntomas, se acuda de inmediato al centro de salud más cercano y se evite el contacto con otras personas.
Asimismo, se insiste en la importancia de mantener las medidas de prevención, como el uso de mascarilla, el lavado de manos y el distanciamiento social, para evitar la propagación de la variante Pirola, que ya se ha extendido a varios países de América Latina y Europa.