Un equipo de médicos británicos está finalizando un estudio que respalda el uso de cigarros electrónicos y vapeo de nicotina como métodos para dejar de fumar. Sanjau Agrawal, asesor especial sobre tabaco del Royal College of Pshysicians, anunció durante el Encuentro Nacional 2023 sobre el cigarrillo electrónico que el estudio se publicará en febrero de 2024 y que pretende animar a los fumadores a utilizar estas alternativas para abandonar el cigarro tradicional, al mismo tiempo que quiere mantener a los jóvenes alejados del consumo de ambos productos.
John N. Newton, director del departamento de análisis de salud pública de la Oficina Nacional para la Mejora de la Salud y contra la Desigualdad, destacó la posición del nuevo gobierno de Rishi Sunak en la lucha contra el cigarrillo convencional, incluyendo el aumento progresivo de la edad mínima para su compra legal.
Actualmente, el uso de cigarros electrónicos en el Reino Unido está en ascenso, mientras que el de cigarros convencionales y las enfermedades relacionadas con el tabaco va ala baja. Sin embargo, existe un leve incremento en el consumo total de nicotina, lo que sugiere la necesidad de implementar un control cuidadoso de los productos con nicotina que vayan surgiendo.
Newton enfatizó que, aunque vapear es menos dañino que fumar y ayuda a dejar el hábito, es esencial que los no fumadores y los jóvenes se mantengan alejados de estos productos. Por otro lado, el estudio de la profesora Caitlin Noley de la Universidad de Anglia Oriental reveló que los jóvenes tienden a alternar entre vapear y fumar, influenciados principalmente por el costo del cigarro convencional.
Los expertos abogan por combatir la percepción equívoca de que los riesgos del vapeo y el fumar son iguales, que a veces lleva a los jóvenes y adultos a preferir el cigarro convencional. Un estudio del Instituto Wolfson sugiere que vapear tiene un 60 % más de efectividad para dejar de fumar en comparación con otros métodos que, aunque los riesgos a largo plazo no son completamente conocidos, serían notablemente menores que los del tabaquismo.