Después de meses de incertidumbre, entre el 10 y el 11 de noviembre Morena anunció a los que serán sus candidatos a la gubernatura en las nueve entidades que se disputarán en 2024, algo que dejó inconforme a más de uno. Al principio, el diputado federal Ignacio Mier Velazco se negó a reconocer los resultados y, si bien ya se “alineó” con el partido, esto puso en duda la unidad del partido.
Al respecto, la exalcaldesa Claudia Rivera Vivanco aseguró para Imagen Poblana que la unidad al interior del partido debe ser algo que todos prioricen para seguir adelante con la consolidación del proyecto de la 4T, no solo en Puebla, sino en todo el país. También se pronunció respecto al hecho de que pocas mujeres hayan ganado las encuestas y hayan sido relegadas por los hombres.
Rivera Vivanco sostuvo que la unidad y la organización en el partido están garantizadas, no solo para lograr el objetivo de que Claudia Sheinbaum sea la primera mujer presidenta, sino para que puedan consolidar su proyecto también consiguiendo las mayorías en las dos cámaras, de diputados y de senadores. Se dijo convencida de que Morena conseguirá esa meta, aunque para ello deberán cerrar filas.
Respecto a la reacción que tuvo en primera instancia Nacho Mier, la morenista aseguró que esta no compromete a futuro la unión en Morena, ya que fue parte de los acuerdos que todos trabajarían en favor del movimiento. Agregó que cada uno de los participantes en este proceso lo vivió de diferente manera y la mayoría respetó los resultados, aunque no todos tuvieron el mismo manejo de sus emociones cuando las encuestas no les favorecieron.
“Cada uno experimentó sus emociones y lo complejo que fue también el proceso. Todos estamos, y al menos así quedamos al terminar la mesa de encuentro en la que se nos dieron a conocer los resultados, en que íbamos a hacer un trabajo de unidad, que íbamos a defender esta agenda obradorista y, sobre todo, a garantizar la defensa de la transformación”, dijo Claudia Rivera.
Algo más que se criticó de este proceso es que en algunas de las encuestas las mujeres no tuvieron la misma proyección que los hombres, pues solo en dos hubo victorias de mujeres y en las otras tres entidades que les corresponden por norma tuvieron que recurrir a la regla de paridad de género.
En este sentido, la expresidenta capitalina dijo que la participación de las mujeres iba a ser un reto por lo que, explicó, el partido se enfocó en diseñar un proceso de selección con perspectiva de género para dar prioridad a las mujeres que tuvieran mejores oportunidades de ganar, a fin de que tengan más representación política.
Puntualizó en que la regla de paridad de género jugó un papel crucial al momento de tomar decisiones, ya que si no se hubiera dado la determinación de asignarle la candidatura de la Ciudad de México a Clara Brugada sobre Omar García Harfuch, en Puebla la candidatura habría recaído sobre una mujer, en este caso ella que fue la mejor posicionada en las encuestas.
Resaltó que para las mujeres lo más importante era estar en la contienda y demostrar que pueden manejarse de diferente manera, pero también que se atreven a hacer política desde otra perspectiva. Sostuvo que, al menos en su caso, se siente satisfecha con los resultados obtenidos y estos le llenan de orgullo.