La Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (SEMARNAT), por medio de la Dirección General de Vida Silvestre (DGVS), está propiciando que haya aún más tráfico ilegal de especies silvestres en nuestro país y que la pobreza extrema se esté agudizando al estar negando, frenando o retrasando (por varios meses) permisos indispensables para el aprovechamiento sustentable de fauna y flora silvestre, aprovechamiento que para miles de familias mexicanas es su sustento diario, su única fuente de ingresos, alerta la Asociación de Zoológicos, Criaderos y Acuarios de México (AZCARM).
La Dirección General de Vida Silvestre es una de las más importantes de la SEMARNAT y su titular, María de los Ángeles Cauich García, está provocando un verdadero caos en la gestión y administración de este sector, pero, aún más grave, está poniendo en serio riesgo la vida de cientos de miles de ejemplares y literalmente está dejando sin comer a miles de familias muy necesitadas.
“Las comunidades que viven directamente de los recursos de la tierra, del mar, de los ríos, etc. Ven pasar las temporadas de pesca, de avistamiento de ballenas y también de siembra y cosecha, y no pueden ni pescar ni promover el turismo responsable ni recolectar plantas y semillas para consumo o para sus usos tradicionales, porque les niegan los permisos sin ninguna explicación o bajo el argumento de que los criterios para otorgar dichas autorizaciones ya cambiaron arbitrariamente a capricho de la Directora General de Vida Silvestre, dejando de lado las normas y reglamentos a los que se han ceñido durante años las comunidades y pueblos originarios”, indicó el Presidente de la AZCARM, Ernesto Zazueta.
En este sentido, dijo que lejos de que la DGVS esté protegiendo a las especies de flora y fauna que están amenazadas o en riesgo, está provocando mayor tráfico y comercio ilegal, furtivismo y clandestinaje al estar obstaculizando o prácticamente paralizando el mercado legal.
“Por un lado les está dejando el camino libre a las mafias que actualmente rigen el tráfico ilegal de especies, porque en contra ellos no está habiendo ningún tipo de vigilancia u operativo especial. No hay quien frene a los pescadores, cazadores, taladores furtivos ni a los comerciantes ilegales, nacionales y extranjeros, a aquellos que realmente se están apoderando de nuestros recursos naturales y explotándolos indiscriminadamente, pero eso si, están frenando la gran mayoría de los programas de manejo y conservación de varias especies de flora y fauna silvestre que realizan las Unidades de Manejo para la Conservación de la Vida Silvestre (UMA) y en los Predios o instalaciones que maneja vida silvestre en forma confinada fuera de su hábitat natural (PIMVS) con los “nuevos criterios de evaluación” que, además, los están haciendo retroactivos sin medir las consecuencias”, detallo Zazueta Zazueta.
De manera específica en la AZCARM estamos muy preocupados por que la DGVS está entorpeciendo los programas de conservación del lobo mexicano y del cóndor de California, programas en los que se han invertido muchos recursos y tiempo, y que han sido exitosos por la constancia y el buen trabajo en equipo de especialistas y autoridades, pero si continúan con las negativas y obstáculos injustificados, estas especies podrían volver a estar en peligro de desaparecer,
Finalmente lamentamos que la austeridad republicana esté llegando a las zonas y poblaciones más necesitadas del país, y no a la DGVS, pues no entendemos que no haya recursos para proteger nuestras Áreas Naturales Protegidas y a nuestras especies, pero sí para que la Directora Cauich García asista a un sin número de reuniones internacionales que no tienen ninguna importancia o impacto en nuestro sector ambiental.
“Debe haber congruencia en el sector ambiental, desde la AZCARM le hacemos un respetuoso, pero enérgico llamado a la SEMARNAT para que acabe con la inoperancia y arbitrariedad de la DGVS es mucho lo que está en riesgo, estamos hablando de la vida de cientos de miles de animales y del sustento de miles de familias. De uno de los temas que debería ser la prioridad de nuestro país, la protección de nuestros recursos naturales y de los sectores más vulnerables de la población. Exigimos que nos dejen trabajar a los que estamos haciendo conservación, reproducción, reintroducción, rescate y resguardo de fauna silvestre y que combatan a las mafias de tráfico y explotación de nuestra biodiversidad”, concluyó.