Un reciente estudio señaló que tener niveles altos o bajos de colesterol de lipoproteínas (HDL) de alta densidad está relacionado con un pequeño aumento al riesgo de demencia en adultos mayores. Este estudio no prueba que altos o bajos niveles de HDL pueden causar demencia, pero demuestra su asociación.
Más de 55 millones de personas viven con demencia en el mundo, según datos de la Organización Mundial de la Salud (OMS). Este es un término que engloba diversas enfermedades que pueden afectar la memoria, pensamiento y capacidad para realizar actividades cotidianas.
El estudio apoyado por el National Institute on Aging y National Institutes of Health, fue dado a conocer en la versión online de la revista Neurology, portal de la Academia Americana de Neurología (AAN). Publicado el 4 de octubre, participaron 184 mil 367 personas del plan de salud de Kaiser Permanente del Norte de California. Los participantes tenían una edad promedio de 70 años que no tenían demencia al principio del estudio.
Maria Glymour, epidemióloga de la Universidad de Boston, declaró que investigaciones previas en demencia fueron inconclusas. Esta investigación es especialmente informativa porque hubo una gran participación y seguimiento. La información revelada permitió enlazar la demencia con los rangos de colesterol y lograr estimaciones precisas, incluso para personas con niveles de colesterol bastantes altos o muy bajos.
Colesterol y demencia
Los niveles promedio de colesterol HDL es de 53.7 miligramos por decilitro (mg/dL). Los niveles considerados sanos deben de estar por encima de 40 mg/dL para los hombres y 50 mg/dL para las mujeres.
Según los hallazgos de la investigación, las personas con los niveles más altos de colesterol HDL tuvieron una tasa de demencia un 15% más en comparación con las del grupo medio. Aquellos con los niveles más bajos tuvieron una tasa de enajenación mental del 7% más en comparación con las del grupo medio.
Estos resultados tomaron en cuenta factores que pudieran afectar los riesgos de demencia, tales como uso de alcohol, hipertensión, enfermedades cardiovasculares y diabetes. Los investigadores encontraron una ligera asociación entre las lipoproteínas de baja densidad o colesterol "malo" y el riesgo de demencia.
La elevación del riesgo de demencia con alto y bajo nivel de colesterol HDL fue inesperado, pero ese incremento fue pequeño y su significado clínico es incierto, explicó Glymour. En contraste, no se encontró asociación entre el colesterol de lipoproteínas de baja densidad y el riesgo de enajenación mental.
Con fines de investigación, se llenó una encuesta en los hábitos de salud y en los niveles de colesterol medido durante las visitas rutinarias al médico en un promedio de 2.5 veces en los últimos dos años. Posteriormente, fueron seguidos dentro del sistema de salud de Kaiser Permanente a través de registros médicos electrónicos durante un promedio de nueve años. En ese tiempo, 25 mil 214 personas desarrollaron demencia, dice el estudio. (NotiPress)