El legislador Kevin McCarthy fue destituido este 3 de octubre como presidente de la Cámara de Representantes de Estados Unidos, tras una moción promovida por el propio Partido Republicano.
La Cámara baja —que requirió 15 rondas de votaciones para elegir a McCarthy— nunca antes había destituido a un presidente en ejercicio de sus funciones. De hecho, no había celebrado una votación para remover a su líder en más de un siglo.
Sin embargo, esta vez los legisladores de la Cámara aprobaron una moción para destituir a Kevin McCarthy como presidente en una votación de 216 a favor y 210 en contra. La moción fue presentada por el congresista republicano Matt Gaetz en respuesta al apoyo de McCarthy al acuerdo de financiación del Gobierno de Estados Unidos a corto plazo, algo por lo que había luchado el presidente Joe Biden, del Partido Demócrata.
Gaetz alega que McCarthy llegó a un supuesto acuerdo secreto con Biden sobre la ayuda financiera y militar a Ucrania como parte de las negociaciones de financiación del Gobierno. McCarthy niega dicho señalamiento.
Gaetz es representante del ala más conservadora del Grand Old Party y miembro del llamado Freedom Caucus, una bancada afín al expresidente Donald Trump (2017-2021).
La rebelión encabezada por Gaetz contó con el apoyo de ocho legisladores de extrema derecha que han expresado su enojo contra McCarthy por trabajar con los demócratas para evitar un cierre del gobierno.
Los demócratas, que se reunieron a puerta cerrada el 3 de octubre por la mañana para discutir qué estrategia seguir, finalmente decidieron no salvar a McCarthy.
"Los demócratas de la Cámara de Representantes seguirán anteponiendo las personas a la política. Estamos dispuestos a encontrar un terreno común bipartidista", dijo el líder de la minoría demócrata en la Cámara de Representantes, Hakeem Jeffries, en un mensaje en X, antes Twitter.
Ahora, los legisladores deben elegir un nuevo presidente permanente.