El nombre de Puebla en el proceso independentista de México debe de verse como algo más que la simple creación del Chile en Nogada, pues hubo varios episodios que resultaron determinantes en la obtención de la Independencia.
Primero que nada, hay que señalar que Puebla estuvo ocupada por mucho tiempo por el ejército Insurgente, lo que permitió que en su momento fuera la primera ciudad independiente al declararse su desvinculación de la Nueva España el 5 de agosto de 1821.
Nicolás Bravo fue quien se encargó de combatir a las tropas españolas en la recta final de la batalla que concluyó un 17 de julio de 1821, permitiendo que el 26 de julio Agustín de Iturbide pudiera llegar a Cholula.
Debido a un acuerdo para respetar la independencia, Agustín de Iturbide entró a Puebla hasta el 2 de agosto de 1821 y el 5 de agosto se leyó el Plan de Iguala desde uno de los balcones de lo que es hoy el Palacio Municipal.
Puebla también tuvo un papel determinante en la historia de la independencia, por ejemplo, con la Batalla de Izúcar ocurrida el 23 de febrero de 1812, donde los insurgentes comandados por Mariano Matamoros derrotaron al ejército español.
El segundo momento fue la Batalla de San Agustín, que se desarrolló en lo que ahora es Palmar de Bravo, ocurrida el 12 de agosto de 1812, donde Nicolás Bravo terminó por alzarse con la victoria frente al ejército realista.
Posteriormente se libraron otras batallas, pero uno de los momentos determinantes ocurrió el 5 de noviembre de 1815 cuando José María Morelos y Pavón fue capturado en la región de Tehuacán.
Morelos y Pavón fue trasladado posteriormente a Ecatepec, Estado de México, donde murió fusilado en diciembre de 1815, dándole el paso a Vicente Guerrero para encabezar la lucha independentista.